Foto: Motogp.com
![]() @todocircuitoweb |
Está claro que muchas veces tu físico te ayuda a desempeñar algunos trabajos con más facilidad que otros y si hablamos de pilotar una moto, no cabe duda que la talla del piloto es un factor importante a nivel de adaptación a la montura y aerodinámica.
Pero a lo largo de la historia del motociclismo hay decenas de casos de pilotos que han demostrado que se puede competir al nivel de los demás sin tener la altura de Dani Pedrosa, por poner un ejemplo. En el artículo de hoy hablamos con uno de los tipos más altos de la parrilla de Superbikes, Loris Baz, que ha dejado claro que su altura no le ha impedido estar luchando por conseguir triunfos en las disciplinas a las que se ha dedicado.
A día de hoy, el francés forma parte del equipo Ten Kate Racing de Yamaha, en la que sería su sexta temporada. Todos sabemos que la crisis del coronavirus ha obligado a parar toda clase de competiciones y en el campeonato del mundo de Superbikes se habían corrido tres carreras antes del bloqueo. En la clasificación provisional de 2020, Baz se encuentra en el séptimo lugar, y repasaremos con él los años que se dedicó en cuerpo y alma al campeonato del mundo de MotoGP.
En 2015 pilotó para el Forward Racing con una Yamaha de la clase CRT y más tarde pasó a ser miembro del equipo privado Avintia Racing, con una GP15 que le aportó muchas alegrías tanto a él como al equipo, llegando a rozar el cajón en un par de ocasiones por delante de Héctor Barberá, que ya llevaba con la misma moto dos temporadas. Loris manifiesta honestamente en una entrevista a Crash.net que "fue realmente desafiante. Creo que hice un buen trabajo, aunque algunas cosas las podría haber hecho mucho mejor, y tuve mala suerte el primer año. Mi último año con la Ducati en MotoGP lo disfruté. Muchas Q2 y top ten con la Desmo".
El sueño del joven galo desde que era niño era ser piloto de MotoGP, por eso, cuando dejó el equipo de Kawasaki en el campeonato del mundo de Superbikes en 2014, más de uno le llamó "loco" por cambiar de categoría. Hasta llegaron a insinuarle que su altura le impediría conseguir lo que estaba buscando. El hueco que dejó en el equipo Kawasaki fue rellenado por Jonathan Rea, una apuesta que le ha salido al equipo mejor de lo que hubieran imaginado porque el norirlandés acumula desde entonces cinco coronas consecutivas.
Sin embargo Baz se siente orgulloso de su paso por MotoGP, aunque reconoce que le queda la espinita de haber pilotado una moto oficial a la que poder haber sacado todo el provecho que él quería. "Pasar a MotoGP fue muy muy difícil. Un sueño desde que tenía ocho años, sólo deseaba competir allí, pero mucha gente me dijo que era demasiado alto y que estaba loco si creía que iba a tener éxito. Era demasiado pesado y no tuve la moto correcta".
Actualmente no se arrepiente de haber invertido su tiempo e ilusiones en una categoría como la de MotoGP, puesto que afirma orgulloso que a pesar de su 1'91 centímetros de altura, nunca modificaron su moto, fue rápido y realizó gestas que muchos no hubieran imaginado con sus medios.
Leer también: Superbikes: Jerez cambia de octubre al mes de agosto
Desafortunadamente para él y sus ganas de cumplir su sueño, se vio sin montura a finales de 2017, puesto que el Avintia Racing había ocupado el box fichando a Tito Rabat y a Xavier Simeon para la siguiente temporada, de manera que el joven galo tuvo que regresar a Superbikes y a día de hoy sigue demostrando ser competitivo pese a su altura.