Foto: Motogp.com
 Redacción @todocircuitoweb |
Valentino Rossi no es un piloto que esté acostumbrado a perder muchos duelos. A lo largo de sus 25 años de trayectoria deportiva, el piloto italiano ha ganado un incontable número de batallas frente a otros rivales, pero jamás olvidará un duelo que perdió frente a un piloto español que acabó costándole un título mundial.
Fue en el año 2006, concretamente en el Circuito de Estoril, penúltima ronda de la temporada. Rossi llegaba a Portugal segundo del mundial con 224 puntos, 12 menos que el líder en ese momento, el norteamericano Nicky Hayden, y salió a la pista lusa con la firme intención de ganar la carrera ayudado por su compañero de equipo, Colin Edwards.
El incidente que Dani Pedrosa y Nicky Hayden protagonizaron antes de llegar al ecuador de la carrera (el español tiró a su compañero de equipo) ponía el título casi en bandeja a Valentino, que sin embargo se encontró con la férrea resistencia de otra Honda, la privada de Toni Elías, a la postre ganador de esa carrera por dos milésimas de diferencia sobre el italiano.
Esos cinco puntos que Rossi se dejó en Portugal fueron exactamente los mismos que finalmente le separaron del título en Valencia sólo una semana después, cuando Hayden acabó tercero y Valentino sufrió una caída que le privó del que habría sido su sexto título en la categoría reina.
Ahora, 14 años después, Toni Elías ha rememorado para DAZN cómo fue aquel histórico triunfo con la Fortuna Honda en Estoril, su primera y única victoria en MotoGP frente al mejor piloto de la historia tal y como ha definido el catalán al nueve veces campeón del mundo.
Aquí tienes un resumen de lo mejor que ha contado Toni Elías durante la retransmisión de la carrera junto a Ernest Riveras:
Su nueva vida en EEUU: "Todo empezó con un test y ya son cuatro años, y vamos a por el quinto, y con una familia ya creada aquí y todo. Tenemos un pequeño Toni de un año y viene una niña ahora en agosto".
Estoril 2006, la mejor carerra de su vida: "Sí, lo es. Poder ganar una carrera de MotoGP es muy importante, pero lo que hace esta carrera o esa victoria más importante es el personaje contra el que luchamos, Valentino, poder luchar de tú a tú y ganarle sólo me ha pasado una vez en la vida. Es un gran recuerdo que siempre tendré en el corazón".
Foto: Motogp.com
La ayuda de Michelin fue clave: "Era mi primer año con Gresini y Cecchini [su jefe de mecánicos]. Empecé a trabajar con Cecchini a mitad de temporada, la verdad es que mejoramos bastante. Pero necesitábamos también ayuda de Michelin, que llegó para esta carrera, en otras carreras perdíamos muchísimo al principio, en esta perdimos muy poco, podíamos adelantar, y esto nos hizo estar en una posición muy diferente. La ayuda de Cecchini y Michelin fue fundamental para conseguir este resultado. El grip mecánico no lo puedes solucionar electrónicamente. Lo crea un chasis, un basculante, unas bieletas... eso hace que se deforme la carcasa del neumático. En ese momento no teníamos las piezas necesarias para 'deformar' la carcasa del neumático. Políticamente los equipos satélite no las podíamos tener, y tuvimos que inventar con Cecchini otras soluciones, y lo conseguimos, pero llegó un momento en el que no era suficiente. En esta carrera nos llegó un neumático con una carcasa más blanda, el neumático nos lo dieron a probar el sábado, y mejoramos siete décimas el ritmo. Y en carrera pude luchar de tú a tú contra estos pilotos que anteriormente me era imposible. Gracias a Nicolas Goubert [entonces jefe de Michelin Motorsport] nos llegó este neumático, pero luego me enfadé un poco con él, porque después de Valencia él me dijo personalmente que este neumático ya lo tenían otros pilotos durante todo el año, y le dije 'hostias Nicolas, gracias porque me has ayudado a ganar esta carrera y hacer un gran resultado en la última, pero me podías haber dado este neumático todo el año'. Eran cosas políticas, existen y hay que aceptarlas. Cuando al neumático le puedes dar forma, eres el rey del mambo. Sin grip mecánico, puedes ser un gran piloto pero no Dios, y acabas el 10º o el 14º".
Las marcas de tabaco en MotoGP aportaban mucho dinero (Camel, Fortuna, Marlboro...): "Esos años eran buenos, los equipos de fábrica y los satélites tenían mucho dinero, los pilotos cobraban más... era diferente. La situación económica global de todos los equipos era mejor. Todo el mundo, aunque estuvieras en el último equipo de MotoGP, ganabas dinero, y los pilotos cobraban dinero. Fue una pena, pienso que se debería replantear todo esto un poco, el tema salud es importante, pero encontrar la manera sería importante para todos, encontrar una solución diferente de esponsorización, sin que afectara a la salud".
La opinión de Elías sobre los satélites: "Nunca en la vida un satélite va a ganar un campeonato del mundo, es política. No puede pasar. No puede un equipo satélite con los esponsors que tienen las fábricas no queda bien, no es posible ni va a serlo. Hemos podido ganar carreras con satélites, Crutchlow ha podido ganar carreras siendo satélite, pero aunque una fábrica te haga firmar un contrato con el que vas a tener una moto oficial, y yo he firmado ese contrato, y nunca pasó, y Crutchlow nunca va a tener la moto de Marc Márquez, imposible. Aunque lo digan. Un día Crutchlow va a retirarse, y podrá hablar como yo estoy haciendo ahora, y él no está teniendo el material que pueden tener los otros, y no lo va a tener. Y está haciendo un trabajo increíble con lo que tiene, me gustaría ver a Cal con una Honda oficial, daría mucho que hablar. Daría problemas, y eso no interesa".
Rossi no olvida la derrota de Estoril: "A Valentino le veo todos los años en Austin. Aún lo tiene clavado en el corazón, no me lo ha perdonado. Tú dices 'tío, ya está, ya pasó, ya es momento de ser amigos', pero con este tío es imposible, es tan competitivo... lo tiene clavado, no me lo va a perdonar nunca. Para mí es al revés, le gané un día pero para mí es el mejor piloto de todos los tiempos hasta hace poco, porque ahora es Marc Márquez, y le va a superar creo".
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Alex Crivillé estaba en su box: "Fue el único año que trabajamos con Alex Crivillé, pero para mí él fue un amigo, siempre fue un referente y un piloto al que admiro mucho, y tener el privilegio de tenerle a mi lado ese año fue una pasada. Sus consejos, su presencia... increíble, y al final logramos este gran resultado".
