 Redacción @todocircuitoweb |
A sus 19 años, Tony Arbolino es uno de los pocos italianos del Mundial de Moto3 que no está bajo la tutela de Valentino Rossi. El piloto del Rivacold Snipers Team encara en 2020 la que será su cuarta temporada consecutiva en el paddock mundialista, un año en el que Arbolino parte como uno de los grandes favoritos en la lucha por el título después de las dos victorias y del cuarto puesto final que alcanzó en 2019, su mejor año con diferencia hasta la fecha.
Lamentablemente, el 2020 no arrancó para Arbolino como él esperaba. Un incidente con Darryn Binder en la parte final de la carrera del Gran Premio de Qatar cuando ambos peleaban por una posición de podio condenó las opciones de Arbolino, que finalmente sólo pudo arañar un punto en un gran premio en el que aspiraba a todo.
"Fue un fin de semana que me dejó un sabor amargo", ha asegurado Arbolino en una entrevista ofrecida a GPone.com desde su domicilio en Lugano. "Ahora estoy aquí en casa, obligado como todos los demás y sin un podio, me duele pero me está haciendo más fuerte. Ahora estoy aquí en Lugano intentando entrenar en casa porque los gimnasios están cerrados".
Arbolino no tiene miedo a la hora de asumir que 2020 debe ser su año de consagración, una presión extra que de momento lleva sin problemas: "No hay que ocultar la verdad, es el tercer año que estoy en este equipo y el segundo con mi jefe técnico. Estoy en buena forma. Este año he trabajado duro en casa para prepararme después de que la temporada pasada fuese tan positiva, es obvio que muchos dicen que soy el favorito. Es algo que pienso lo menos posible, no me afecta en absoluto. Sé que estoy bien preparado, he aprendido de los errores de 2019, aunque Moto3 siempre es una categoría difícil. En Qatar era el favorito y luego Binder me golpeó y ahora voy 15º en el Mundial".
Desde hace un par de años, Arbolino sigue los consejos de Jorge Lorenzo a la hora de planificar sus entrenamientos y mejorar su pilotaje. Ambos se conocieron accidentalmente entrenando en un gimasio de Lugano, y desde entonces han compartido miles de kilómetros en bicicleta, incontables sesiones de entrenamientos con motos pequeñas e incluso vacaciones en la playa.
Ahora, la pandemia de coronavirus les mantiene alejados: "Jorge está encerrado en un hotel en Dubái, de vez en cuando hablamos sobre cosas menores, nos hacemos bromas y cuando me escribe siempre me divierte", cuenta Arbolino.
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A la pregunta de si Jorge Lorenzo supone para Arbolino una figura como la de Valentino Rossi dentro de la VR46 Academy, el piloto de Garbagnate Milanese confiesa que "sí, absolutamente", y añade que "tener un campeón como Jorge a tu lado te cambia, es cómo los pilotos de la academia de Valentino Rossi. Los pasos que te hace dar no son tanto como una guía, son más de cabeza, estar cerca de una leyenda me está ayudando en muchos aspectos, sobre todo en la percepción de los resultados", concluye el dorsal #14 de Moto3.
