 Redacción @todocircuitoweb |
Por segundo año consecutivo, Marc Márquez ha vuelvo a sufrir en los test IRTA de Sepang. La operación de hombro a la que se sometió el pasado mes de noviembre todavía le está condicionando su rendimiento a los mandos de la RC213V, una motocicleta a la que el #93 no se subía desde el último test celebrado en Jerez, días antes de pasar por quirófano.
Hoy, en el cierre del test de Sepang, Márquez se metía otras 47 vueltas en el cuerpo -las mismas de ayer- para acabar 13º en la combinada de los tres días, a 423 milésimas del hombre de referencia en Malasia: el francés Fabio Quartararo, responsable de liderar las tres jornadas de entrenos oficiales.
El de Cervera confesaba este domingo haber acabado "destrozado" este primer test IRTA del año, unos entrenos que han acabado con otra caída -la segunda de esta semana- en la última curva de Sepang, por fortuna a baja velocidad: "Por la tarde volví a salir pero sufrí una caída porque ya me faltaba la energía. He llegado al límite con mi cuerpo porque por la mañana forcé un poco más", admitía el de Honda.
De momento, Márquez no se encuentra cómodo sobre la moto por culpa del hombro: "La posición del cuerpo aún no es la que me gustaría. Hemos hecho una gran mañana y lo hemos intentado por la tarde. Cuando he parado ya he dicho que no puedo dar indicaciones demasiado precisas porque no piloto al máximo".
De hecho, admite que "en otras condiciones", con su físico al 100%, "habría podido salvar la caída, pero con el hombro como está no era el caso", añadiendo que hoy ha llevado su cuerpo "al límite" para intentar ayudar a Honda a desarrollar la RC213V 2020, un prototipo que, según palabras del propio Marc, todavía tiene apartados que no le convencen.
"Honda tiene que seguir trabajando y apretando porque las demás marcas han mejorado", resume el español. "Los rivales han dado un pasito porque Yamaha y Suzuki han mejorado. Hemos dado pasos pero tenemos que seguir trabajando", valora el #93, que no se esconde al confesar que llegará a la primera carrera del año en Losail con cierta preocupación por el rendimiento de su Honda.
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"Para la primera carrera, en Qatar, estoy más preocupado por la moto que por mi estado físico, porque hay cosas que hemos probado que no han terminado de convencerme. Evidentemente, el nivel de esa parte técnica la marca la competencia, y en este caso ha dado un paso adelante", añade Marc, que coincide con Andrea Dovizioso al afirmar que el nuevo Michelin trasero favorece el pilotaje de la Yamaha y la Suzuki: "Con este agarre, Rins y Viñales son los que van más rápido", apostilla Márquez.
