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Johann Zarco ya ha dejado atrás su peor temporada en el Mundial de Motociclismo. Con sólo 30 puntos en su casillero y después de haber corrido para el equipo KTM oficial y el LCR Honda, el piloto de Cannes se está preparando a conciencia para el reto que tiene por delante en 2020: ser competitivo con la Ducati Desmosedici del Avintia Racing, estructura que abandona su estatus de 'privado' para pasar a ser un equipo satélite de los de Borgo Panigale, lo que implica mejor material y más apoyo técnico por parte de la fábrica italiana.
El piloto galo ha hablado para la revista Motosprint sobre todo lo ocurrido en estos últimos meses, detallando los motivos que le llevaron a romper su acuerdo con KTM en el primero de los dos años de contrato que ambas partes habían firmado antes iniciar esta fallida aventura.
"En algún momento tienes que entender lo que realmente quieres", explica Johann. "Yo no podía ser feliz mientras me pagan por no hacer nada. No podría vivir así. Hay cosas peores en la vida que ir en moto, por supuesto, pero yo quiero pilotar para ser rápido. No podía hacerlo y estaba triste, no quería correr sólo por el dinero. Fue un paso psicológico".
A la pregunta de si ahora, un año después, se arrepiente de haber firmado con KTM, Zarco lo niega, pero también revela que su fichaje por parte de la marca naranja fue obra de su antiguo representante, Laurent Fellon: "No me arrepiento, aunque debo decir que firmar con ellos no fue totalmente mi elección. Fue mi ex-mánager, confié mucho en él, de hecho tal vez fue ese exceso de confianza en el que nos llevó a tomar una decisión apresurada. Ahora he dejado todo atrás y sólo puedo mirar hacia delante y esperar lo mejor con Ducati".
Antes de aceptar la oferta conjunta que Ducati y Avintia le pusieron sobre la mesa, Johann estuvo a punto de regresar a Moto2 con uno de los mejores equipos de la categoría: "Tuve la oportunidad de firmar con el Marc VDS, un equipo que ha ganado dos títulos en tres años con Morbidelli y Alex Márquez, pero había un riesgo: si le hubiera dicho no a Ducati, tal vez en el futuro no me habrían abierto las puertas".
Fue entonces cuando Paolo Ciabatti y Gigi Dall'Igna contactaron con el bicampeón de Moto2: "Llegó en el último minuto. Quizás podría haber hablado primero con ellos, pero cuando tuve la oportunidad de pilotar la Honda lo aproveché, no tenía tiempo para preparar un plan B. Yo soy mi propio representante, si hay que hablar con alguien tengo que hacerlo yo. Después de que KTM me dejara en casa en Misano pasé unos días extraños, así que cuando me llamaron de Honda acepté de inmediato, considerando que todavía había dudas sobre el futuro de Lorenzo. Cuando Jorge anunció su retirada, pensé que tal vez se acercaba la suerte. No fue así, pero un día después Ducati me llamó".
En Borgo Panigale fueron claros y directos con el francés: "Me prometieron un crecimiento del equipo Avintia en 2020, tendrán apoyo real desde Ducati. El cambio de un equipo privado a un satélite ya es un un paso adelante. También me dijeron que soy un piloto interesante para ellos, y eso me convenció. La gente todavía cree en mí. Fui rápido en el pasado y en mi pequeño desafío con Honda he demostrado que todavía puedo ser ese piloto".
Zarco es consciente de que Avintia puede ser la puerta de entrada al equipo oficial Ducati, cuyos pilotos actuales -Andrea Dovizioso y Danilo Petrucci- finalizan contato a finales de este mismo año. "Sería bonito, pero quiero concentrarme en el presente, en el día de hoy", dice Zarco al respecto. "Estoy esperando los test de febrero, si voy rápido será positivo, y luego todo vendrá como consecuencia".
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"Está claro que un lugar en el equipo oficial es un sueño para cualquiera", añade el dorsal #5 de MotoGP, "será mi objetivo, pero no lo es ahora. Ahora pienso ir rápido con la Ducati de Avintia. Tengo que fijarme un objetivo real, aspirar al top 10. A partir de ahí, intentaré mejorar cada vez más", puntualiza el galo.