 Redacción @todocircuitoweb |
Maverick Viñales fue el último invitado que pasó por la pizarra de DAZN durante este pasado Gran Premio de Las Américas. El piloto de Yamaha compartió una interesante charla con Ernest Riveras en la que habló en profundidad de su estilo de pilotaje, de los problemas que está teniendo en las salidas con la Yamaha y de cómo está trabajando este año en cambiar su posición sobre la moto para mejorar en las aceleraciones y contrarrestar esa falta de grip que acusan los pilotos de Yamaha desde el año pasado.
El de Roses se define "como un piloto inteligente encima de la moto, pienso mucho, y creo que cuando tengo la moto en el sitio puedo hacer tiempos perfectamente iguales, y eso es lo importante", y además está convencido de que habría sido mucho más competitivo en su etapa con Suzuki de haber llegado al equipo de Hamamatsu con la experiencia que acumula a día de hoy en MotoGP: "Con la experiencia que tengo ahora, habría hecho otros resultados ahí", dice en referencia a Suzuki.
Uno de los cambios más importantes que ha tenido que aplicar en su transición de la GSX-RR a la YZR-M1 es el uso del freno trasero tal y como explica el propio Maverick: "El freno de atrás no lo estoy usando mucho con la Yamaha, no nos funciona nada bien el freno de atrás porque todavía tenemos problemas con el freno motor, y cada vez que lo uso engaña mucho al freno motor, porque parece que la rueda está patinando más, entonces la moto me saca freno de motor y entonces ya no paro en la curva. Entonces no lo uso. Es algo que tuve que cambiar mucho el año pasado, en 2017 sí que lo usaba un montón porque el freno motor iba muy bien, pero en 2018 y este año cuesta mucho, no lo uso a penas".
El piloto de 23 años asegura ser "agresivo" con el acelerador, "de on/off", una técnica que le obliga a sacar el cuerpo de la moto mucho más que sus rivales: "Cuando la levanto recta de atrás va derrapando, saco mucho el peso y va derrapando, esto tengo que mejorarlo", cuenta Viñales, convencido de que necesita modificar este aspecto "a base de vueltas", si bien sabe que "es muy difícil porque en el fondo es mi pilotaje. Lo bueno de este año es que con Esteban, mi técnico, vemos estas cosas y se puede mejorar durante todo el año".
Comparando su estilo con el de otros pilotos como Marc Márquez, Viñales cree que parte de la técnica aplicada por el piloto de Cervera también guarda relación con el tipo de moto que lleva cada uno: "Las motos son muy diferentes, quizás la Honda es más estilo Moto2 que pudes entrar derrapando, agresivo. Con la nuestra hay que ir como en un raíl, si no vas así la moto no va, hay que ser muy preciso. Al final he tenido que hacer un poco más exagerado mi pilotaje para encontrar ese grip, si no no salgo de las curvas, derrapa un montón la moto".
El estilo actual de Viñales es muy efectivo a una vuelta -este año lleva una pole en Qatar y un segundo puesto en parrilla en Argentina-, pero el español confiensa que luego, en carrera, no acaba de funcionar: "Para una vuelta rápida va bien [mi estilo], va perfecto, porque haces las curvas que vuelas. El problema es después para buscar grip, porque al final lo que hago es que le saco poco contacto a la goma, uso menos goma y me derrapa más. Eso lo tengo que cambiar, estoy trabajando mucho en ello".
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A la pregunta de si aprovecha los settings de su compañero Valentino Rossi para tratar de sacarle el máximo provecho a la M1, Viñales responde que "Valentino y yo pilotamos muy diferente, yo necesito siempre una moto mucho más agresiva y rígida para mi pilotaje. Pilotamos bastante diferente. Él pilota mucho más encima de la moto, eso le da un poco más de grip. Pero estamos mejorando, estoy aprendiendo mucho este año la verdad".
Por último, en relación al problema que Maverick arrastra con las salidas desde el año pasado, el de Roses dice "no saber" qué es lo que ocurre para perder tantas posiciones cuando se apaga el semáforo: "Luego miro en 2016 [con Suzuki[ y salía como un avión. Con esta moto no salgo bien. Estoy probando de todo. Perdemos mucho en la salida. Pero es lo que hay, hay que mejorar, no puedo hacer otra cosa. El año pasado tuvimos muchísimos problemas en las salidas y de puesta a punto. El año pasado se levantaba mucho la moto, todo el rato a una rueda. Tenemos que encontrar el punto del setup, porque al final en la salida perdemos muchísimo. Este año me está costando mucho el que la moto avanza".
