Valentino Rossi ha dejado claro que no se va de Ducati, que hay que ser paciente y que todo llega. Durante una rueda de prensa quiso zanjar cualquier tipo de duda, y respecto a si se piensa marchar después de esta complicada, temporada, Il Dottore ha dicho que sólo es "la opinión de un periodista", " no me voy a rendir tan pronto".
El piloto italiano ha manifestado “Es pronto para un divorcio ¿no?”, y ha añadido que están trabajando duro porque su meta es ganar algo un día con esta moto ya que "sería algo increíble, fantástico”. Sin embargo, es evidente que las cosas no van y bien y que “si continuamos así el año próximo se necesitará tomar una decisión”. Pero su paciencia parece infinita y no deja de repetir: “necesitamos tiempo”.
Respecto a la lesión en el dedo meñique que sufrió tras una caída en el último Gran Premio de Motegi, en Japón, Rossi ha comentado que “es sólo una pequeña fractura de 1995 reabierta pero creo que estará bien para competir aquí”.
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