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Desde hace unas horas está circulando por redes sociales un vídeo en el que Valentino Rossi aparece empujando a un comisario en Sepang el término de la carrera de MotoGP del Gran Premio de Malasia. El vídeo, que ya se ha hecho viral en medio mundo, ha generado una ola de críticas hacia el piloto de Yamaha por su actitud, con insultos y descalificativos de todo tipo por parte de aficionados y de mucha gente que, posiblemente, ni siquiera sigue el Mundial de Motociclismo.
Sin embargo, hay que poner en perspectiva el momento en el que se produce este empujón y los motivos que llevan a Valentino a apartar a esa persona que se había acercado, teléfono en mano, a hacer un selfie con su móvil, una acción que los comisarios tienen totalmente prohibida.
En primer lugar, los comisarios de cualquier gran premio de motocilismo tienen la orden de no tocar ni abrazar a los pilotos al término de una carrera. ¿El motivo? Por un lado, no a todos los pilotos les gusta recibir abrazos ni palmadas en la espalda cuando cruzan la línea de meta, y por otro, se evita desestabilizar al piloto cuando está parado encima de su moto. Es algo que se les explica en el briefing previo, y que por supuesto deben cumplir si no quieren que su puesto de comisario peligre en el futuro.
De hecho, el periodista de MCN, Simon Patterson, explicaba horas después del incidente de Valentino que un supuesto periodista había sido expulsado este fin de semana de la sala de prensa del Circuito de Sepang por haber intentado hacerse otro selfie con un piloto que en ese momento atravesaba la zona habilitada para periodistas y reporteros gráficos. El piloto, lógicamente, manifestó su queja por el momento y las formas, lo que provocó la retirada del pase de prensa a ese periodista.
The man they came to see...So close yet so far for Valentino Rossi 😣 #MalaysianGP 🇲🇾
Publicada por MotoGP en Sábado, 3 de noviembre de 2018
Otro detalle que habría que considerar es el momento en el que el comisario trata de sacarse la foto y cómo aborda al piloto de Yamaha. Tras una caída a falta de cuatro vueltas cuando lideraba la carrera, Valentino se había parado frente a la grada de su club de fans para agradecerles el apoyo recibido a lo largo de todo el fin de semana. El propio Valentino confesó al término de la prueba que su decepción por la caída era "enorme" y que tardaría días en olvidarla, de modo que uno puede imaginar el estado de ánimo del #46 segundos después de cruzar la línea de meta en la 18ª posición como consecuencia de la caída.
La reacción de Valentino no fue más que la respuesta a la actitud de un marshall que estaba haciendo algo que no debía en un momento nada oportuno. Tampoco hay que olvidar que los comisarios son, en su mayoría, aficionados al mundo del motor que prácticamente trabajan gratis en este tipo de eventos para disfrutar del ambiente y estar cerca de los pilotos. Pero, a pesar de ser una vocación, no están exentos de cumplir unas normas para evitar situaciones desagradables como la que se ha vivido hoy en Sepang.
Este otro vídeo, grabado por un comisario durante el Gran Premio de Holanda 2015, muestra cómo es el trabajo de un marashall durante un fin de semana completo de competición, con largas horas de espera en el vial, una rápida reacción a la hora de asistir a los pilotos en una caída y el enorme respeto que les brindan al término de la carrera, sin tocarles ni abrazarles en ningún momento: