 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
Malas noticias para Jorge Lorenzo. El piloto español ha pasado hoy por el Centro Médico del Circuito de Motegi para someterse a una revisión por parte de los responsables médicos de MotoGP con el objetivo de decidir si el piloto de Ducati es apto o no para correr este fin de semana en Japón.
Si bien Lorenzo ha sido declarado 'Fit' por parte del doctor Ángel Charte y su equipo, un nuevo scanner ha revelado que la pequeña fractura que sufrió en su muñeca izquierda durante el GP de Tailandia es más grandes de lo que se pensaba en un principio, y no descarta su ausencia en Motegi si mañana no se encuentra cómodo sobre su Ducati durante el FP1.
"Desafortunadamente las sensaciones no son muy buenas", lamentaba Lorenzo a los micrófonos de Movistar tras salir del Centro Médico. "Hace unos minutos he vistro otro scan, después de dos semanas del que me he hice en Tailandia, se ve que se ha hecho desde otro punto de vista y en éste se ve la fractura má completa que en la que vimos en Tailandia. El dolor es similar, no ha mejorado mucho, según qué posiciones y movimientos haga con la muñeca me duele bastante. De todos modos tengo pensado salir mañana y ver cómo me encuentro, pero de momento las sensaciones no son buenas para nada".
Uno de los miedos que los médicos le han trasladado a Lorenzo es la posibilidad de que la fractura termine desplazándose en algún movimiento brusco, lo que agravaría aún más la lesión y prolongaría los plazos de recuperación: "El riesgo es que la fractura no está desplazada, es completa pero no está desplazada, y el riesgo es que del esfuerzo en las frenadas, sobre todo en esta pista, se desplace. El dolor no me preocupa porque con anestesia o antidoloríficos lo podría llevar, pero el riesgo de esto me preocupa, vamos as ver cómo me encuentro en la moto. Con la moto las sensaciones no son muy buenas. No espero encontrarme muy bien sobre ella, pero nunca se sabe, hay que probar".
Tal y como ha ido mostrando a lo largo de estos días en redes sociales, Lorenzo no ha dejado de entrenar a nivel físico para intentar llegar en el mejor estado de forma a Motegi. El propio piloto balear ha reconocido que, si bien "los primeros días vi una pequeña evolución", luego se dio cuenta de que la lesión no progresaba como él esperaba: "Luego a la que he forzado un poco iba para atrás. Quizás la fractura no era para operar, y por eso decidimos no operar. Una operación con un metal quizás hubiese fijado más el hueso y no existiría esa posibilidad de desplazarse, y una fractura de este tipo requiere 40 días sin operación para que se fije totalmente, que suelde del todo. Ahora mismo visto el scan no se ve una gran evolución del soldado del hueso. Las sensaciones no son buenas, pero quiero probarme mañana y ver cómo me encuentro encima de la moto".
