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Foto: Kalex
 Por Alfonso Somoza @sukosomoza | Google + |
El segmento Supersport agoniza. Yamaha ha sido el único fabricante a nivel mundial que ha hecho un esfuerzo por renovar su YZF-R6 para adaptarla a las exigencias técnicas actuales, además de trabajar en su motor y sistema de escape para cumplir con la normativa Euro4 y seguir viva en el mercado europeo más allá de 2018.
Sin embargo, el resto de fabricantes con cierta tradición en este segmento -Kawasaki, Honda, Suzuki y Triumph- no están por la labor de invertir más dinero en sus máquinas de supersport, un segmento cuyas ventas se han visto canibalizadas por las potentes y futuristas superbikes, amén del impacto de la crisis económica mundial.
Esta crisis no afecta únicamente a los mercados: los campeonatos que cuentan con categorías de Supersport también están notando la falta de inversión en este segmento, y cada vez hay menos pilotos interesados en correr con deportivas de 600 cc.
La organización que está al frente del Campeonato Británico de Superbikes no es ajena a este problema, por eso han decidido reaccionar rápidamente anunciando una nueva categoría en el BSB a partir de 2018 bautizada como GP2. ¿En qué consiste? Básicamente, se admitirán dos tipos de motos: por un lado, prototipos con chasis, basculante, carenado y deposito de combustible artesanales que monten en su interior un motor homologado por la normativa FIM Supersport o Superstock de cualquier marca, es decir, un cuatro cilindros de 600 cc con un máximo de 16.000 rpm, o un tricilíndrico de 675 cc que no gire más allá de las 15.200 rpm. La organización estima que la potencia de cada motor rondará los 125 cv.
También podrán entrar en esta categoría de GP2 cualquier Moto2 del Mundial de Motociclismo o del FIM CEV Moto2 que haya sido ensamblada antes del 1 de enero de 2018.
Foto: Kalex
Aunque las nuevas GP2 compartirán pista con las Supersport a lo largo de la temporada 2018 del British Supersport Championship, cada categoría puntuará por separado. El campeonato será monogoma, con slicks Pirelli.
Stuart Higgs, responsable de la empresa promotora del campeonato MSVR, cree que estamos "en un punto crítico para esta categoría. Nos preocupa desde hace tiempo que ciertos fabricantes hayan dejado de producir motos deportivas de 600 cc, lo que afecta directamente a la sostenibilidad de la clase Supersport".
"La integración de motos fabricadas de forma independiente con un chasis de carreras y un motor estándar ha demostrado ser equitativa con el nivel técnico de Supersport de un chasis estándar y un motor preparado", apuntan los organizadores del campeonato.
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Uno de los motivos que han animado a MSVR a crear la categoría de Moto2 es la futura llegada de motores tricilíndricos de 765 cc al Mundial de Moto2, un cambio que obligará a todos los equipos a desprenderse de sus máquinas de 600 cc, incrementando la oferta de prototipos de Moto2 en toda Europa: "El Mundial de Motociclismo está a punto de migrar a una nueva generación de máquinas y motores de Moto2 que permitirán la llegada de material que antes no estaba disponible en el mercado. Esto, junto con el resurgimiento del interés de las compañías de ingeniería independientes interesadas en desarrollar hardware de carreras a medida, hace que este sea el momento ideal para renovar esta categoría tan importante".
Si estás interesado en conocer más detalles de esta categoría GP2, puedes consultar su reglamento técnico en este enlace.
