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El dominio de Kawasaki y Ducati en el Mundial de Superbike ha provocado que los organizadores del campeonato (Dorna, la empresa promotora, en especial) busquen una forma de mejorar el espectáculo. Entre las grandes propuestas destaca la introducción de una centralita única, una medida exitosa en MotoGP, y otras voces piden más implicación de las fábricas en lugar de limitaciones técnicas. Es el caso de Jonathan Rea, cuyo argumento se centra en que Honda y Yamaha se muestran muy competitivas en las 8 horas de Suzuka, donde sus equipos tienen apoyo directo de fábrica.
A nivel deportivo, la única novedad reseñable que se ha introducido en los últimos tiempos es la parrilla invertida para la segunda carrera y las nueve primeras plazas. Esta medida ha mejorado la emoción de los dos-tres primeros giros, pero no ha variado la regularidad de Kawasaki y Ducati en lo más alto del podio. El gran rendimiento de Jonathan Rea también ha restado dramatismo al campeonato porque su regularidad le ha permitido destacarse de sus rivales tras la disputa de pocas pruebas.
Para evitar este tipo de situaciones, el British Superbike cuenta con un arma distinta a otros campeonatos: el Showdown. Este formato hace que los seis primeros clasificados del campeonato se conviertan en 'Title Fighters' ('Candidatos al título') y se disputen la corona en las tres últimas pruebas del campeonato (un total de 7 carreras, porque la última es triple).
MV Agusta, candidata al top cinco en muchas carreras, podría ser una de las grandes beneficiadas por el Showdown | Imagen: MV Agusta Reparto Corse
Los seis contendientes empiezan el último tramo del curso con 500 puntos más una serie de tantos que premian sus resultados del año. Cinco por cada victoria, tres por los segundos puestos y un punto para cada tercera posición que hayan conseguido. Se beneficia la regularidad en el podio, y también es una forma de reagrupar a los pilotos de referencia para que no haya nada decidido durante el mayor tiempo posible.
A nivel de espectáculo parece una opción más que válida, pero hay que tener en cuenta los factores empresariales: tiene lógica que Kawasaki y Ducati, las fábricas que más recursos ponen sobre la mesa, no quieran que los resultados de todo un año de trabajo se pongan en juego en solo tres carreras. La mala suerte puede jugársela. Por supuesto, Honda y Yamaha lo apoyarían.
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Finales apretados a un lado, es importante recordar que el problema del Mundial de Superbike no se centra solo en las últimas rondas del campeonato. La falta de público en algunos circuitos europeos es notable, aunque se está trabajando en ello: carreras divididas entre sábado y domingo, venta de entradas con opción a paddock... A nivel de televisión, es absolutamente necesario que en países como España se ofrezca una cobertura regular como la que Opensport ofrece desde hace unas semanas. Este proveedor de streaming emite en directo toda la acción del sábado y el domingo con los comentarios de uno de los periodistas especializados más reputados, Juan Pedro de la Torre.
Organizar un Showdown podría ser una medida sensata para recuperar las expectativas de la afición de WSBK, pero es algo complicado porque las marcas tienen intereses comerciales depositados en la victoria. Un final de año épico les daría visibilidad en algunas ocasiones, pero les privaría de la corona en otras. Queda mucho por negociar si se busca el revulsivo para un campeonato que atravesó grandes dificultades hace unos años.
Ejemplo con 2017
De haberse celebrado un Showdown en WSBK 2017, Jonathan Rea no habría llegado a Magny-Cours con 120 puntos de ventaja, y la clasificación a falta de tres pruebas habría sido la siguiente:
- 1. Jonathan Rea (573 puntos)
- 2. Chaz Davies (545 puntos y habría ascendido una posición en el campeonato)
- 3. Tom Sykes (532 puntos y habría descendido una plaza)
- 4. Marco Melandri (516 puntos)
- 5. Alex Lowes (504 puntos)
- 6. Michael van der Mark (503 puntos)
Con un escenario así, Rea no habría tenido oportunidades matemáticas en Magny-Cours y el desenlace de la temporada se habría atrasado hasta, como mínimo, Jerez.