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Maverick Viñales ha demostrado hoy en Argentina que lo de Qatar no fue casualidad. El piloto de Yamaha no ha dejado escapar ninguna de las dos sesiones del viernes en Termas de Río Hondo, marchándose al motorhome con el mejor registro del día, un 1'39.477 que le ha permitido meterle algo más de tres décimas a Marc Márquez, posiblemente su gran rival en Argentina este próximo domingo.
El #25 dice estar "contento" por cómo han ido hoy los entrenamientos libres y asegura haberse sentido "bien" desde el primer momento: "Creo que estamos haciendo un gran trabajo. La moto funciona bien, hemos modificado muy poco desde Qatar porque sabemos que tenemos un setup bueno, así que hay que intentar dar vueltas con los neumáticos, intentar entender cuál será el neumático de carrera que será difícil, e intentar mejorar el grip trasero porque aquí está siendo difícil".
Hablando de neumáticos, Viñales se ha visto obligado por Dirección de Carrera a probar el compuesto duro trasero un mínimo de cinco vueltas, un pequeño test que ha resultado satisfactorio para el catalán, que establecía su mejor registro del FP1 con este compuesto. Sin embargo, de cara a la carrera, el de Yamaha no tiene muy claro si optará por el duro o por el compuesto medio asimétrico, que incorpora una banda extra-dura en el flanco derecho: "El duro trasero en principio muy bien pero luego cae mucho, entonces hay que valorar y ver si el medio aguanta toda la carrera".
A diferencia de Qatar, el trazado de Termas de Río Hondo presenta unos incómodos baches que producen muchos movimientos no deseados en las motos, algo que Viñales ha podido comprobar en sus propias carnes: "La pista está bacheada y las motos se mueven, entonces al final es lo que hay, se mueve la moto y tienes que intentar adaptarte. Esta mañana he tenido un susto, tienes que adaptarte, no hay otra, la pista es lo que hay". Por suerte, Viñales cree que el asfalto no está tan sucio como en años anteriores: "La pista está mucho más limpia que el año pasado, por eso los tiempos son más rápidos".
Por último, el catalán ha explicado el susto que ha sufrido en el FP1, cuando su moto ha estado a punto de sacarle por orejas saliendo de la chicane de entrada a meta: "He cambiado de dirección muy rápido con la rueda levantada y me ha dado como un latigazo, y me he quedado un poco sin respiración, por eso no he seguido apretando".