 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
Carlos Checa está viviendo un retiro dorado. El piloto de Sant Fruitós de Bages colgó las botas al término de la temporada 2013, y desde entonces no ha dejado de viajar por todo el mundo como embajador oficial de Ducati, además de aprovechar la más mínima ocasión para ponerse a los mandos de una moto off-road para practicar enduro y rallyes, una de sus grandes aficiones.
En declaraciones al portal GPone.com, Checa reconoce que sus entradas a circuito son ahora muy escasas. El español sigue colaborando con Ducati en el desarrollo de la Panigale de Superbikes, aunque su trabajo se limita a un par de jornadas de test al año para dar su opinión sobre los avances y novedades introducidos al inicio de cada temporada.
"No, ya no ruedo en circuito", explica el español. "Sólo he hecho un par de test con Ducati este año, soy su embajador y también de Nolan, que ha estado conmigo a lo largo de toda mi carrera. De vez en cuanto también piloto en rallyes por diversión, y alguna carrera de enduro".
El campeón del mundo de SBK en 2011 reconoce que no le importaría dirigir su propio equipo en algún campeonato de carácter internacional, aunque de momento no se pone fecha: "Todavía tengo tiempo para decidirlo, quién sabe. Sería bonito tener un equipo, ayudar a pilotos que están creciendo, aunque no quiero convertirme en sus madres o padres (risas). El director de un equipo siempre está en el ojo del huracán".
Tras debutar en el Gran Premio de Europa de 125 en 1993, Carlos Checa no abandonó el Mundial de Motociclismo hasta el año 2008, cuando puso rumbo al WSBK. El catalán logró dos victorias en 500 (Catalunya 1996 y Jarama 1998) además de 22 podios, consiguiendo en 1998 su mejor resultado final con un cuarto puesto sobre una Honda NSR 500.
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— Carlos Checa Carrera (@CarlosCheca7) 10 de noviembre de 2016
¿Quién ha sido el rival más duro de Checa durante todos estos años? "De todos mis rivales es difícil decir quién fue el más complicado", responde Checa. "Capirossi, Stoner, Melandri... no lo sé, todos fueron grandes y fuertes. La característica principal que tiene que tener un gran piloto es fortaleza mental, además de la habilidad para resistir la presión; además, sólo debe querer una cosa: ganar. Estoy seguro de que mi rival más completo fue Valentino Rossi".
Preguntado por su primer y único título mundial de Superbikes, conseguido en el año 2011 con el Althea Racing a los mandos de una Ducati 1098, Carlos confiesa que "ganar el campeonato fue fantástico, por supuesto. Es fácil recordar las victorias, pero conseguir ese resultado fue un proceso largo e intenso, con dificultades, pero seguí trabajando para conseguirlo. A lo largo de mi carrera he aprendido de mucha gente, de casi todo el mundo. Creo que siempre podemos aprender de alguien, porque todos somos únicos y originales. He mantenido una buena relación con todo el mundo y sigo viéndolos a todos, fuera de los circuitos".
