 Por Alfonso Somoza @sukosomoza | Google + |
El Circuito Red Bull Ring ha llevado a cabo un cambio de última hora en su trazado para mejorar su cuestionada seguridad de cara al Gran Premio de Austria que arrancará mañana viernes con la disputa de los primeros entrenamientos libres.
Tras el último test celebrado aquí en el mes de julio, Franco Uncini -oficial de seguridad de la FIM- se reunió con varios pilotos en la Safety Commission para discutir la seguridad del circuito austriaco y valorar la posibilidad de realizar algunas modificaciones en su diseño.
Las quejas de los pilotos se centraron en tres curvas: la número 3, la 8 y la 10. Todas ellas cuentan con una escapatoria insuficiente de acuerdo a la opinión de los pilotos de MotoGP, unas críticas a las que también se suman las de Casey Stoner, que no dudó en cuestionar la seguridad del Circuito de Spielberg antes incluso de subirse a su Ducati durante el último test celebrado aquí.
La curva 10 del Red Bull Ring antes (izq.) y despúes (der.)
Tras escuchar a los pilotos, la FIM ha decidido cambiar el trazado de la curva 10, la que da acceso a la línea de meta. La salida de esta curva se ha estrechado, pasando de 13 a 10 metros, un cambio que obligará a los pilotos a reducir todavía más su velocidad antes de afrontar este último giro.
De este modo, según la FIM, "se reducirá la velocidad en la salida de la curva y aumentará la seguridad". Con este cambio, los tiempos por vuelta serán sensiblemente más lentos que los registrados durante el último test.
En lo que respecta a las curvas 3 y 8, las modificaciones que piden los pilotos supondrían unas obras de cierta envergadura para poder ampliar las escapatorias que habrían obligado a retrasar o suspender el GP de Austria. Por lo tanto, no se descarta que el Red Bull Ring modifique estas curvas a de cara al gran premio del próximo año.
