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 Por Alfonso Somoza @sukosomoza | Google + |
Maverick Viñales era hoy uno de los pilotos más buscados en el paddock de Mugello. El joven piloto del ECSTAR Suzuki ocupaba todos los titulares de la prensa del motor a primera hora después de que Yamaha confirmase su fichaje de cara a las dos próximas temporadas, formando equipo con su ídolo, Valentino Rossi, con el que siempre ha hecho muy buenas migas.
Preguntado por su decisión de dejar Suzuki para subirse a la moto que dejará libre Jorge Lorenzo, Viñales cree que "ha sido un paso bueno en mi carrera deportiva entrar en un equipo que tiene tantos títulos. De cero ya podré tener la ocasión de luchar por el título, pienso que ha sido un salto positivo y muy importante para mí. Creo que cuando entras a un equipo en el que las expectativas siempre son ganar, al final el objetivo cambia. Es una cosa en la que yo siempre he trabajado muy bien, la presión, así que estoy contento de poder luchar desde el primer momento por un título".
El piloto de 21 años ha reconocido que fue "dificil" decirle adiós a Suzuki: "Sí por supuesto, me lo he pensado muy bien, he pensado en todos los pros y todos los contras, y al final mi corazón ha decidido este camino. Sobre todo lo que me ha dejado claro Suzuki es que para ellos era muy importante en su equipo, y sobre todo el cariño que he tenido en este equipo será difícil de olvidar. Siempre me quedará darle las gracias por el gran trabajo que están haciendo".
Viñales ha necesitado mucho tiempo para meditar bien la decisión, y no fue hasta el pasado sábado cuando viajó hasta Milán para estampar su firma en el contrato que le vinculará con Yamaha hasta finales de 2018: "Para mí era importante sobre todo el estar seguro. Al final, como ha dicho Davide Brivio, me gustaba mucho el proyecto de Suzuki, la gente, me gustaba mucho Davide porque siempre, desde que entré en 2015, ha sido una de las personas en mi carrera deportiva ha creido más en mí. Siempre hemos hablado mucho. Por una parte, humanamente me ha costado mucho, tengo mucho aprecio a toda la gente de Suzuki y eso me ha hecho dudar, además creo que tienen un gran potencial en el desarrollo de esta moto y puede llegar lejos. Pero en este momento pienso que para mi carrera es más importante otras cosas".
"Al final lo que me ha convencido es poder optar a ganar desde ya", añade Viñales, "a tener un título. Pienso que cuando saltas a MotoGP tu objetivo es ganar, así que pienso que para mi carrera deportiva ha sido la decisión acertada, y como siempre he dicho, al final es la que decido yo e iré al 100%".
Maverick también ha querido dar su opinión sobre la situación que atraviesa su compañero Aleix Espargaró, que hoy ha criticado a Suzuki por no cerrar su renovación antes de fichar a Andrea Iannone, una incorporación de la que Aleix no tenía ni idea, y ha tenido que esperar al comunicado de prensa para enterarse.
"Pensé que después de decidir mi futuro, Suzuki firmaría rápidamente con Aleix", explica Viñales, "pero al final no ha sido así, y han firmado con Iannone. Creo que Aleix siempre ha trabajado muy duro con la fábrica y está consiguiendo buenos resultados, en Jerez estuvo por delante mía. Está claro que si mantienen a Aleix serán un equipo fuerte, pero ellos tienen que mirar por su futuro, y Rins es también un piloto muy fuerte. Si estuviese en su posición, no sé lo que haría. Tienen que pensar mucho en lo que necesitan: experiencia o un nuevo talento".
Por útimo, era inevitable que el piloto gerundense hablase de su futuro compañero, Valentino Rossi, con el cual espera "poder hacer un muy buen trabajo, pienso que puedo aprender muchísimo y es una cosa importante. Creo que mi relación con Valentino seguirá siendo buena, pero en la pista no hay amigos. Cada uno tiene que hacer su trabajo e intentar ganar".
