El equipo Yamaha Factory Racing ha dado por terminada su participación en los test de MotoGP celebrados en Austin organizados por HRC. Durante estos dos últimas jornadas, tanto Jorge Lorenzo como Valentino Rossi han completado más de 100 vueltas al circuito norteamericano con el fin de aprenderse la trazada correcta y tomar algunas referencias para ajustar sus Yamaha M1 de cara al Gran Premio Red Bull de EEUU que se celebrará aquí el próximo 21 de abril.
Lorenzo ha sido el más rápido del dúo Yamaha con un mejor crono de 2’04.351, cinco décimas más lento que el tiempo de Marc Márquez, líder de los test. Lorenzo ha confesado sentirse hoy mejor, "especialmente en la última tanda antes de la pausa del almuerzo. Hemos cambiado la puesta a punto de la moto y hemos mejorado algunas décimas, así que estamos más cerca de los pilotos más rápidos, pero no tanto como nos gustaría. Hemos empezado con una suspensión demasiado blanda, la hemos cambiado después por otra más dura y en esta pista funciona".
"Creo que estos dos días aquí son suficientes para hacerse una buena idea de los reglajes y el estilo de conducción. Los fans disfrutarán viendo MotoGP aquí, va a ser un gran espectáculo. Hemos probado diferentes configuraciones en la moto, sin piezas nuevas, simplemente jugando con los cambios en la puesta a punto, suspensión y horquillas, y en la última vuelta he mejorado medio segundo solo con estos cambios".
"Todavía no tenemos suficiente grip en el neumático trasero de modo que no puedo tumbar con confianza, de ahí que estemos más atrás que en Sepang. Estoy adaptando mi estilo de pilotaje al trazado en cada vuelta. En la recta principal alcanzamos los 340 km/h lo que es una velocidad increíble; cuando tienes que frenar y levantar el casco el viento es muy fuerte así que es difícil mantener la estabilidad", aseguraba Lorenzo.
Por su parte, el italiano Valentino Rossi ha sido el que peor se ha adaptado a este nuevo trazado entre el resto de pilotos de MotoGP presentes en Austin, marchándose con un mejor registro de 2.04.960, por detrás incluso de la Honda RC213V satélite de Stefan Bradl. "El feeling con el circuito ha mejorado hoy", comenta Rossi; "hemos empezado a trabajar en la moto para mejorar en los puntos difíciles, sobre todo en las tres áreas de frenadas fuertes en las que es importante tener una buena estabilidad. Es también muy importante tener buen grip en el ápice de la curva para conseguir una buena velocidad en la recta".
"Parece que aquí se puede marcar una gran diferencia en las partes lentas. La parte de la chicane en la curva dos es muy técnica y difícil, ya que es ciega, hay que rodar un poco con la memoria. Paso a paso, hemos mejorado mucho desde ayer, pero tenemos algunas desventajas en comparación con los otros, y necesitamos hacer todas las secciones como un conjunto. El objetivo era venir aquí, tratar de entender la pista e intentar estar listos para la carrera".
"Nuestros rivales pueden acelerar más rápido que nosotros desde la horquilla y tienen un poco más de agarre en inclinación que nosotros, así que estas son las áreas en las que tenemos que trabajar”, ha añadido el piloto italiano.
Fuente y fotos: Yamaha MotoGP Press
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