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Durante las dos semanas que se celebra el TT de la Isla de Man, el circuito del Mountain Course permanece abierto al tráfico urbano la mayor parte del día, cerrando las carreteras única y exclusivamente para celebrar los entrenamientos y las carreras. Esto permite a numerosos aficionados poder recorrer los 60 kiómetros del circuito urbano más asombroso del mundo sobre sus propias motos, una situación que en ocasiones genera accidentes.
En el vídeo puedes ver precisamente lo que le ocurrió al piloto de esta Aprilia RSV4, que en su intento de emular a McGuinness, Dunlop, Anstey, Hutchinson y compañía, termina empotrando su preciosa máquina italiana contra una de las protecciones laterales. Por suerte, el piloto de la BMW S1000RR que le sigue puede esquivarle y parar más adelante para ayudarle.