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Las curvas de Mulholland recibieron el fin de semana pasado un curioso invitado. Se trata del Peraves MonoTracer (a partir del minuto 1:14), un interesante ejercicio de diseño e ingeniería suizo que combina las ventajas de una moto con la carrocería de un coche. Propulsado por un motor de origen BMW K1200R, sus 130 cv de potencia transmitidos a la rueda trasera mediante cardan le permiten alcanzar los 250 km/h. La carrocería es una mezcla de kevlar, fibra de carbono y resina epoxy, dejando el pesto total del MonoTracer en 485 kilos. En el vídeo verás que es capaz de inclinar prácticamente igual que una moto deportiva, siendo capaz de alcanzar algo más de 50 grados.
A la hora de detener la moto o de circular a velocidades inferiores a los 20 km/h, el MonoTracer despliega dos ruedas laterales que aseguran su estabilidad. Por dentro no falta detalle: tenemos climatizador, control de crucero, radio con navegador, faros de xenón... eso sí, el manillar sigue estando presente con su correspondiente acelerador en el puño.
El precio de esta moto carrozada era de 80.000 dólares (64.000 euros) en 2007, el año de su lanzamiento. En la actualidad Peraves sólo ofrece un modelo de su MonoTracer totalmente eléctrico, apodado MTE-150, capaz de alcanzar los 250 km/h gracias a su motor Gen3 de inducción 100A DC/DC capaz de generar 200 cv de potencia. El precio de esta versión eléctrica es de 83.000 euros más impuestos.
