 Por Cristian Ramón Marín @Crms74 | Google+ |
Aunque la espera se está haciendo larga, debemos reconocer que el inicio de la temporada 2018 está a la vuelta de la esquina. Apenas quedan tres semanas para el #SepangTest y, antes de lo que parece, los focos de Qatar iluminarán las pantallas de todo el mundo para que el espectáculo empiece otra vez. Todo show tiene sus grandes protagonistas y, para iniciar una serie de textos llenos de predicciones (probablemente equivocadas, a lo Sandro Rey) hablaremos de Valentino Rossi.
Es importante recordar que 'The Doctor' acaba contrato a finales de la campaña y su rendimiento durante el primer tercio del curso será clave para que el italiano decida si continúa en 2019. Y aquí va la primera predicción: será competitivo (ha demostrado su buena relación con pistas como Qatar, Argentina o Jerez) y renovará. Se sabrá en Mugello y apostaría a que lo hará por un año, pero creo que una retirada a finales de 2019 con un año de contrato por delante sería un golpe de efecto que el #46 sería capaz de rentabilizar y eso lo tendrá en cuenta.
Rossi empezará la pretemporada de forma discreta, algo a lo que ya acostumbra por su forma de trabajar, aunque se preocupará por dejar claro, desde el primer momento, si está de acuerdo con la línea de trabajo seguida por Yamaha. El año pasado mostró su descontento y, cuando los defectos de la M1 salieron a flote, recordó que se podrían haber evitado meses antes. Segunda predicción: no tropezará con la misma piedra.
Entre Qatar y Assen, el de Tavullia ganará, como mínimo, dos carreras. Desde que llegó a la categoría reina, los único años en los que no consiguió imponerse en una prueba durante el primer tramo fueron los de Ducati (2011 y 2012) y 2014. El próximo año, Yamaha pondrá más recursos que nunca para conseguir una moto competitiva y tanto Argentina como Jerez son sitios favorables para su estilo de pilotaje en los que ya ha ganado. Tercera equivocación predicción.
Y aquí la gran pregunta: ¿ganará el título? La apuesta de quien escribe estas líneas es clara: no lo hará. Cualquier aficionado al motociclismo se alegraría por ver el décimo título de Rossifumi porque, si se marchara con esa espina clavada, no sería lo mismo, del mismo modo que nada habría sido igual sin que Ángel Nieto consiguiera el 12+1. Pero hay varios factores en contra de 'Vale' para 2018. Marc Márquez es el piloto con mejor forma de la parrilla en estos momentos y Honda tiene las cosas bastante claras, algo que no ha ocurrido mucho en el último lustro. También hay que mantener viva la candidatura de Andrea Dovizioso y Maverick Viñales, por no hablar de que Ducati pondrá toda la carne en el asador para que su inversión en Lorenzo sea rentable en forma de victorias y título. Muchísima competencia, aunque cuenta con dos grandes herramientas: la regularidad y la experiencia.
Por suerte para el deporte, Valentino seguirá siendo competitivo, aunque es difícil prever una temporada distinta a 2016 y 2017. Quizás, todo dependerá del grado de acierto que tenga Yamaha a la hora de poner en pista su nuevo prototipo. Un equilibrio tan grande como el de 2015 puede poner presión sobre el resto de marcas y los ingenieros de Iwata se han acostumbrado al sabor de la victoria. Lo echan de menos y quieren recuperarlo cuanto antes porque, cuanto más tarden, más difícil será recuperar ese terreno perdido.
Todas estas predicciones se irán al traste en el mismo instante que arranquen los motores sobre el pit lane de Sepang, pero nunca viene mal un ejercicio de proyección para sobrellevar la espera.
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