
Alex De Angelis ya tiene el OK de los médicos para regresar a San Marino. El piloto del Ioda Racing ingresó en el Hospital Universitario Dokkyo de Mibu (Japón) el pasado 10 de octubre, después de sufrir una grave caída durante la FP4 del Gran Premio de Japón. El piloto de 31 años ingresó en estado crítico con un fuerte golpe abdominal que afectaba también a los pulmones, una hemorragia intracraneal y varias vértebras torácicas fracturadas, un parte de lesiones realmente aterrador.
Sin embargo, después de permanecer algo más de una semana ingresado en cuidados intensivos, De Angelis ha ido mejorando día a día, y el hematoma cerebral que tanto preocupaba a los médicos se ha absorbido por sí solo, una de las condiciones necesarias para permitir el traslado del sanmarinense, que se efectuará a lo largo de esta semana en una avión medicalizado. De Angelis ingresará en el Hospital del Estado de San Marino, donde seguirá con su recuperación más cerca de su familia y amigos.
La rehabilitación de piloto del Ioda Racing se centrará especialmente en dos aspectos. Por un lado, recuperar parte de la capacidad pulmonar que ha perdido tras el accidente (atelectasia o colapso parcial de los pulmones), y por otro, vigilar el estado de sus vértebras, lesión que le obligará a llevar un collarín durante varias semanas.
Por fortuna, De Angelis no ha perdido su sentido del humor, y hace unas horas publicaba este mensaje en su perfil oficial de Facebook: "Amigos, ¡me quiero morir! Aquí en el hospital no puedo hacer otra cosa que estar tumbado en la cama de día y de noche. La televisión es en japonés, no tengo Internet y los enfermeros no hablán inglés, por suerte mi padre sigue aquí y mi hermano estuvo hasta ayer. Espero volver pronto y abrazaros a todos".
Además del padre del piloto, De Angelis está acompañado en todo momento por el doctor
Michele Zasa, médico de la Clíninca Móvíl de Dorna.