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Niccolò Canepa, acusado de provocar intencionadamente el accidente de otro piloto durante unas tandas libres en Mugello, se enfrentará a un juicio el próximo 30 de septiembre. Fue denunciado por asalto y agresión y, ahora que queda un mes para esa cita con la justicia, el italiano ha querido explicar su versión a través de su perfil oficial en Facebook.
Los hechos se produjeron el 23 de septiembre de 2013 en el citado trazado italiano. Canepa tomaba parte en una sesión de entrenamientos libres cuando, en un momento dado, tuvo un pequeño percance con otro piloto llanado Davide Cappato. El piloto del Althea Racing, lejos de olvidarlo, le espera en una de las rectas de Mugello, y cuando Cappato está a su altura, acciona de forma aparentemente intencionada la palanca de freno de la GSX-R 1000, causando la caída del otro piloto, que termina en el suelo con la clavícula rota.
El piloto del Althea Racing en el Mundial de WSBK alega que él no tocó el freno del otro piloto: "Mi mano tocó el antebrazo de Cappato". Según Canepa, la causa del accidente fue que Cappato, quien "probablemente estaba asustado", pisó "demasiado fuerte" el freno y perdió el control de su moto. "Eso es".
El de Ducati también explica el contexto en el que se produjo el accidente desde su punto de vista. "Estaba enseñando a un chico que pilotaba su 600cc en Mugello por segunda vez en su vida", aseguró. En ese momento, Canepa tenía el record del trazado y vio que era el momento de "enseñarle algunos trucos" sobre su circuito favorito.
"Cappato probablemente no entendió mi rol de instructor y debió pensar que era extraño –o incluso provocativo– que frenara en algunos puntos (fuera de la trayectoria y sin obstaculizar a nadie, obviamente, como aprendí durante el curso de la Federación Internacional de Motociclismo)", continuó Canepa.
Momento en el que Niccolò Canepa alcanza con su mano la zona del brazo y el freno delantero de Cappato
Tras esta explicación, Niccolò defendió que Cappato siguió en varias ocasiones "trayectorias equivocadas" y le adelantó con tan solo unos centímetros de separación, incluso en la recta de meta de Mugello. Ante esta situación, de acuerdo con sus declaraciones, le pidió en repetidas ocasiones que lo adelantara con una distancia mínima. "Estaba poniendo en riesgo mi seguridad y la de mi pupilo", sentenció.
El piloto de Althea Racing sostiene que todo lo que cuenta puede verse en imágenes que no han salido a la luz y que, además, nunca ha sido amonestado o suspendido por la FIM, a pesar de que lleva 10 años en la competición.
"Solo soy un chaval persiguiendo su sueño y lo hago de una forma honesta y limpia", concluyó Canepa.
A continuación puedes ver el vídeo de lo ocurrido en la Toscana: