Honda NSR250R SP by Tyga Performance: modernizando un icono 20 a�os despu�s

Desde hace unos años, el sector de las motos deportivas de 250 cc a 300 cc parece estar regurgiendo lentamente de sus cenizas gracias al éxito de modelos como la Kawasaki Ninja 300, la Honda CBR250R o la más reciente Yamaha R3. Lamentablemente, las normas anticontaminación y la necesidad de crear motos polivalentes ha restado cierto carácter deportivo a estos modelos de media cilindrada, ideales para gente que comienza su andadura en el mundo de las dos ruedas.

 

Hace más de 20 años las cosas eran muy distintas. Las marcas japonesas y algunas italianas como Aprilia se peleaban por sacar la mejor deportiva 2 tiempos del cuarto de litro, poniendo en el mercado auténticas motos de carreras matriculadas que hacían soñar a los más jovenes. Uno de los modelos que más gustaba por aquel entonces era la Honda NSR250R SP, vestida con los inconfundibles colores de Rothmans, una moto que dejó de fabricarse en 1996 con su última versión denominada MC28.

 

Aprovechando el tirón que están teniendo ahora las deportivas del cuarto de litro, el preparador TYGA Performance ha cogido una Honda NSR250R de 1994 y la ha modernizado con una parte ciclo muy superior, un motor que casi dobla en potencia al original, y algunos cambios estéticos para darle un look moderno. ¿El resultado? Una auténtica preciosidad.

 

 

Empezando por el motor, el V-Twin a 90º refrigerado por líquido crece hasta los 300 cc gracias un nuevo kit de cilindros, con pistones Wiseco, cabezas de cilindro VHM y volante de inercia aligerado. Los carburadores son unos HRC factory NSR250 Keihin 38 mm, y monta un puño rápido heredado directamente de una Honda RS250 de Gran Premio. 

 

El embrague también es nuevo, en seco, con muelles y platos adaptados al incremento de potencia del propulsor. De este modo, de los 40 cv de potencia que ofrecía el propulsor de la NSR250R de serie -limitado por las leyes japonesas- TYGA Performance consigue ahora cerca de 70 cv. La transmisión es HRC original, con relaciones más cortas, cadena RK y corona trasera hecha por TYGA Performance. El escape es totalmente artesanal, fabricado en acero con silenciadores que mezclan carbono y Kevlar. 

 

El chasis permanece de serie, aunque Tyga Performance le ha colocado un nuevo subchasis más ligero. El basculante trasero monobrazo es de HRC, mientras que los semimanillares pertenecen a una Yamaha TZR250. A nivel de suspensiones encontramos una horquilla delantera invertida de otra Honda, una CBR600RR, y detrás un monoamortiguador Öhlins S46HR1C1L específico para la NSR250R, marca que también proporciona el amortiguador de dirección. Los frenos son obra de Brembo, con dos poderosas pinzas radiales M4 Monobloque delante mordiendo discos de Honda RC45.

 

La llanta delantera es las misma que emplea la Honda RS250 de GP, fabricada directamente por HRC en magnesio (17 X3.5), mientras que detrás vemos otro modelo fabricado por Marchesini (17 X 5.5). Las medidas de neumático que monta son 120/70 ZR17 y 160/60/ZR17. Para poder ser homologada para la calle, TYGA Performance ha tenido que montar unos estilizados faros de LED partiendo de un carenado específico para carreras que ellos mismos han fabricado a base de fibra de carbono y Kevlar. El peso total del conjunto, con gasolina y líquidos, son unos ridículos 115 kilos, 40 kilos menos que una NSR250R original de 1994.

 

¿El precio de esta preparación? Lo desconocemos, pero seguro que no será barato. Eso sí, ¡disfrutar viendo las fotos que tienes más abajo no cuesta un duro!