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El vicepresidente de HRC, Shuhei Nakamoto, quiere cortar por lo sano con la polémica surgida a raíz del enfado de Casey Stoner por no poder subirse a la Honda de Dani Pedrosa, de baja durante seis semanas tras operarse de síndrome compartimental en su brazo derecho. Nakamoto reunió ayer por la tarde a varios periodistas internacionales en Austin para explicar su punto de vista sobre esta situación, y exponer las razones por las que HRC decidió que Stoner no era el piloto adecuado para cubrir la baja de Pedrosa.
"Casey vino a Honda, quería ayudar a Dani y al equipo", explica Nakamoto. "Para ser honesto me sorprendió un poco, pero a la vez estaba muy contento por la petición de Casey. Entonces nos reunimos en Japón Kokubu-san -Director de Tecnología-, Yokoyama-san -Director Técnico- y yo para discutirlo. Para HRC Casey es muy importante. Es un VIP. Si Casey vuelve a MotoGP tiene que luchar al menos por el podio. Ese es nuestro objetivo. Estoy seguro de que Casey sigue siendo muy rápido. Pero para el resto de nosotros él necesita un buen set-up en su moto. Por esta razón ho hemos querido confiar en él. Su antiguo jefe técnico, Christian Gabbarini, está trabajando ahora con Jack Miller, así que no podemos pedirle que vuelva con Casey. Ramón Aurín -técnico de Dani Pedrosa- es un buen ingeniero pero nunca ha trabajado con Casey. Incluso Christian ha sufrido a veces para encontrar un buen setting para Casey. Era algo complicado, porque podíamos encontra un set-up o no encontrarlo".
Durante la ronda de preguntas de los periodistas, el vicepresidente de HRC dejó claro que ellos no quieren cerrarle la puerta a Stoner, pero entienden que su regreso sólo será posible cuando el australiano esté en condiciones de luchar por un puesto en el podio: "Repito, nuestra prioridad es que Casey no corra por el quinto o sexto puesto. Nuestra propridad es que él debe luchar por el podio. Pero no he encontrado la confianza necesaria en nuestro lado, el lado técnico. Para mí Casey es como un hijo. Esta decisión ha sido muy dura. Entiendo la decepción de Casey porque yo le he pedido muchas veces que volviese como como wild-card. Si hubiéramos tenido tiempo, al menos un test antes de esta carrera, habría dicho que sí. Pero no hemos tenido tiempo para hacer un test adecuado. Muchos de sus fans, entre los que yo me incluso, quieren ver a Casey peleando de nuevo, pero para mí la prioridad es que pelee por el podio".
Uno de los periodistas le preguntó a Nakamoto si los test que Casey ha llevado a cabo en estos meses con la RC213V oficial no eran suficientes para que el australiano estuviese listo de cara a una posible carrera. "El último test en Sepang fue para probar piezas, no un setting de la moto", explica el japonés. "Antes de Sepang 1 hicimos pruebas con él. Los tiempos por vuelta fueron razonablemente buenos, más o menos 1,5 segundos más lento que su propio récord. Era un buen ritmo porque el circuito estaba sucio y no había ingenieros de HRC con él, los que había sólo estaban para recoger información. Esto quiere decir que Casey se ha mostrado muy rápido, pero para reducir ese margen de 1,5 segundos necesitas una buena puesta a punto".
Livio Suppo -máximo responsable del Repsol Honda Team- también estuvo presente en esta rueda de prensa, explicando más o menos lo mismo que Shuhei Nakamoto. No es un secreto que la relación entre Suppo y Stoner nunca ha sido del todo buena, así que cuando un periodista le preguntó por la respuesta de Stoner cuando le dijeron que no, Suppo se limitó a decir "él tuitea", en referencia a los últimos mensajes que el australiano ha colgado en su perfil de Twitter. "Por desgracia no voy a correr, no necesitaba preparación ya que no tenía planeado ganar, sólo reemplazar a un buen amigo y pasar un buen rato en Texas", comentaba Casey en su último mensaje en las redes sociales.
Ahora que la postura de HRC ha quedado clara, falta por saber si Stoner replicará una vez más la postura del fabricante japonés a través un tweet envenenado o si, finalmente, enterrará el hacha de guerra.