 Por Alfonso Somoza @sukosomoza Google+ |
El año empezó relativamente bien. A pesar de que Bimota no había fabricado las 125 unidades que la normativa obliga a producir para poder debutar en el WSBK, la organización del campeonato les permitió disputar la primera mitad de la temporada sin puntuar en ninguna carrera. Tanto Ayrton Badovini como Christian Iddon lo hicieron muy sobre la Bimota BB3 EVO, peleando siempre por la primera posición en su categoría. Pero llegó el verano y la fábrica de Rimini seguía sin alcanzar el cupo mínimo, por lo que la FIM decidió expulsarles del campeonato.
Uno de los mayores perjudicados fue Francis Batta, dueño de Alstare, que de buenas a primeras se quedó fuera del Mundial de SBK, inciando además una pelea en los tribunales contra Bimota. Con el año ya casi terminado, Alstare quiere quitarse de encima las BB3 que todavía tiene guardadas. El precio del modelo SBK EVO pilotado por Badovini es de 65.000 euros. Existe la opción de adquirir la moto con preparación de Superstock 1000, quedándose el precio en 45.000 €.
Se trata de una ocasión única de tener una auténtica moto de Superbike en el garaje, con unos componentes de primer nivel y un motor de origen BMW S1000RR que anda como un demonio. Si te interesa alguna unidad, puedes escribir a Gregory Hauret-Clos, coordinador de Alstare: greg@alstare.com.
En este vídeo puedes escuchar el rugido de su motor durante el calentamiento en el box:
