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Valentino Rossi ha sufrido una fuerte caída en la última parte de la FP4 de MotoGP disputada esta mañana en Brno. El italiano, que ha terminado encabezando la sesión a pesar del accidente, ha perdido el tren delantero de su Yamaha M1 y ha deslizado sobre el asfalto del trazado checo a gran velocidad.
A pesar de que la caída parecía limpia, Valentino se ha marchado en scooter con evidentes gestos de dolor en la mano izquierda, y se ha ido directamente al centro médico para que le revisaran la mano. Tras realizarle diversas pruebas de rayos X, los médicos han descartado cualquier tipo de fractura, dándole el OK al italiano para disputar la Q2.
Rossi ha salido del centro médico con el pulgar hacia arriba y sonriendo, y finalmente ha podido subirse a la moto, si bien ha tenido que colocarse el guante con mucho cuidado a causa de los dolores que sufre en uno de los dedos de la mano.