 Por Alfonso Somoza @sukosomoza Google+ |
En un primer momento, el Marc VDS Racing decidió darle a Loi una Kalex-KTM privada por cuestiones de presupuesto. Aún así, tanto el equipo como el joven piloto belga empezaron la temporada con muchas ganas, fijando su objetivo en alcanzar el podio lo antes posible. Las carreras fueron pasando y, a excepción de un cuarto puesto en Argentina, Loi ha conseguido unos resultados muy discretos, ocupando en estos momento la 17ª plaza de la general.
En la última cita de Assen, el Marc VDS Racing confirmó que su piloto contaría con una KTM de fábrica en lugar de la Kalex-KTM que había pilotado hasta entonces, un anuncio que sorprendió al propio jefazo de KTM Motorsport, Pit Beirer, que declaró a Speedweek.de que eso era falso: "El Marc VDS Racing nos ha comprado una RC250R carreras-cliente. Nosotros ya hablamos con Bartholemy. Él quería una RC250GP de fábrica, pero en junio ya no tenemos unidades disponibles, sólo teníamos seis carreras-cliente listas. Nos compró una y luego la mejoró. Una carreras-cliente cuesta 45.000 euros, mientras que una oficial son 110.000 euros. Loi ha conseguido una buena moto, sin embargo, no es de fábrica".
La réplica del Marc VDS Racing a estas declaraciones no se ha hecho esperar, y así ha respondido Bartholemy a Pit Beirer: "Este año Livio ha criticado muchísimo la Kalex-KTM así que, para Assen, tomamos la decisión de cambiar a KTM, simplemente para ver si llegaba la mejora que Livio esperaba. Llevamos una KTM RC250R a Assen el miércoles y trabajamos durante toda la noche para ponerla al día. Montamos el motor KTM del Campeonato del Mundo de Moto3, las últimas suspensiones WP y casi todo el catálogo KTM de piezas de fábrica. Cuando sacamos la moto del box el jueves era lo más cercano a una unidad de fábrica que podíamos conseguir. Dudo que hasta KTM hubiera encontrado las diferencias a menos que desmontaran las motos pieza por pieza".
Y añade: “No fue hasta los clasificatorios cuando vimos una mejora en los tiempos de Livio, pero entonces ya era muy tarde. Se clasificó 30º, su peor resultado de la temporada, y acabó la carrera 25º. Fue decepcionante, tanto para Livio como para el equipo.
“Lo que fue aún más decepcionante fueron las críticas hacia el equipo que llegaron después de Assen. Nos criticaron por ir primero con la Kalex-KTM y después por cambiar a la KTM para ayudar a Livio a reencontrar su confianza. Parece que no somos capaces de hacer nada bien para alguna gente.
“Pero la decisión es muy clara. Estamos en Moto3 para competir y Livio necesita comenzar a lograr los resultados que él, la moto y el equipo pueden hacer. Si los resultados no llegan después de este esfuerzo entonces tendremos que estudiar muy bien la viabilidad de continuar en Moto3 si no hay mejoría y acabamos fuera de los puntos cada fin de semana.
“Desafortunadamente, ésta es la cruda realidad de la situación, más cuando correr a este nivel cuesta medio millón de Euros por temporada. El tiempo se está agotando, así que necesitamos un poco de acción…".
