
Por Alfonso Somoza Google+
En febrero de 2014 se matricularon un total de 5.974 motocicletas en España, lo que supone un crecimiento del 15,9% respecto a febrero del año pasado según los datos publicados hoy por ANESDOR. En el acumulado anual (desde el 01 de enero al 28 de febrero) el crecimiento es del 13,8% respecto al mismo periodo de 2013, con un total de 12.087 unidades matriculadas.
En cuanto a los segmentos por tipo de uso, en febrero 2014, crecieron todos los segmentos: los scooters (+6,6%), las motocicletas de off-road (+42,5%) y las de carretera (+28,4%). El mercado mantiene una alta concentración en el segmento scooter, que en febrero supuso el 60,9% del mercado total de motocicletas.
Sin embargo, estos datos positivos no se trasladan al mercado de los ciclomotores, que en febreró se derrumbó un 18,2%, con sólo 775 unidades vendidas. Como viene siendo habitual, el segmento del ciclomotor tipo scooter sigue concentrando la inmensa mayoría (82,7%) de las ventas.
El mercado de Quads, ATVs y UTVs también se mantiene en un volumen bajísimo. En febrero de 2014 se matricularon 98 unidades, prácticamente las mismas en el enero del año pasado (90)
Para José María Riaño, secretario general de ANESDOR, "el mercado de motocicletas continúa creciendo en febrero. La tendencia es muy buena, aunque los volúmenes de unidades siguen siendo demasiado bajos. Esto se refleja en el progresivo envejecimiento del parque español de motocicletas cuya edad supera ya los 14 años.
Sin embargo, la moto continúa discriminada en los planes de ayudas a la renovación del parque. Anunciada una nueva edición del Plan PIMA, se mantienen las ayudas a las dos ruedas eléctricas, que está bien, pero continúan excluidas las motos convencionales. Una discriminación que no ocurre con otros vehículos como turismos o furgonetas.
La discriminación de la moto en los planes de renovación (también excluida del PIVE) es un error: se agrava el envejecimiento del parque perjudicando la seguridad vial y el medio ambiente; se desprecia el efecto positivo que tiene en la recaudación del Estado y se frena la recuperación del mercado y del empleo.
Menos de un 3% del presupuesto total destinado al PIVE serviría para llevar a cabo un plan completo para la moto".