.jpg) Javier OrtegaRedactor |
Nadie puede frenar a Marc Márquez este año. El piloto catalán está exprimiendo como nadie todo el potencial de la Ducati GP25 en su primer curso vestido de rojo, una temporada en la que el #93 va camino de romper todos los récords de victorias y triunfos, todo para conseguir el que sería su noveno título mundial.
Hoy, el de Cervera ha sumado su sexto doblete consecutivo en lo que va de año. Desde Aragón, nadie ha ganado una carrera en MotoGP que no sea Marc Márquez, una tiranía que ya deja una pregunta en al aire: con 142 puntos de colchón, ¿en qué circuito será campeón? ¿Japón... Indonesia...?
La del Red Bull Ring era una cita que le generaba dudas a Márquez; nunca había ganado aquí en MotoGP, una espinita que se ha quitado este fin de semana por partida doble, primero ganando en la Sprint del sábado y hoy venciendo en la carrera larga tras un bonito duelo con Marco Bezzecchi.
"Era un circuito al que le tenía ganas", ha dicho Marc al micrófono de DAZN. "Dejé entrever mis intenciones el jueves, cuando me preguntasteis cuáles eran mis intenciones. Evidentemente, con la moto roja, aquí la intención era ganar, es la moto contra la que perdí todos los años en la última curva. De esas derrotas se aprende".
"Este año hemos trabajado muy bien, venimos con una inercia increíble", reconoce el #93, que no se baja del primer escalón del podio desde la Sprint de Aragón. "Retomar la segunda parte del campeonato con otro pleno de 37 puntos es mucho mejor. Contento, ayer me quedé muy satisfecho con la Sprint, pero hoy mucho más, porque tenía ganas por ser en este circuito y también porque quería dedicarle la victoria a toda la familia de Pau Alsina, que como sabéis nos dejó hace casi un mes".
Para Marc, una de las claves de la temporada está siendo su velocidad en la carrera corta al Sprint: "Lo importante son los sábados. Hoy me ha costado mucho adelantar a Bezzecchi, lo he intentado, me iba hacia atrás... esto hace que el neumático delantero se caliente mucho. He intentado salvar el neumático trasero, pero al no poder frenar tarde, lo estaba utilizando más de la cuenta".
El único piloto que ha sorprendido este domingo a Márquez ha sido Fermín Aldeguer; el de Gresini ha exhibido un ritmo altísimo en la segunda mitad de la carrera, y después de quitarse de encima a Pedro Acosta y Marco Bezzecchi, el murciano se atrevió incluso a intentar reducir la diferencia con el #93, aunque su esfuerzo fue en vano. "Al final de carrera venía un 'outsider', uno que no esperábamos delante, Fermín, con un grandísimo ritmo. Habrá que analizar qué ha hecho bien, porque ha hecho una gran carrera", cuenta Márquez al respecto.
El piloto del Ducati Lenovo Team tuvo que cambiar su estrategia sobre la marcha, especialmente cuando vio que Bezzecchi tenía ritmo para escaparse de todos... excepto de Marc: "Al principio de la carrera yo tenía planificado ir más lento, pero salir me he puesto tercero y he visto que Marco empujaba muchísimo. No sabía cómo llegaría de neumático, pero no quería dejarle ir más de un segundo y medio, porque luego sería difícil recuperar esa distancia. He visto que estábamos forzando mucho el neumático trasero, y de hecho en las últimas vueltas íbamos patinando incluso en la recta. Fermín ayer en la Sprint ya fue el piloto Ducati que mejor guardó el neumático, y hoy seguramente ha sido también su tónica, porque su segunda parte de carrera ha sido muy rápida".
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Con un amplísimo colchón de 142 puntos, Márquez sabe que, de seguir así, podría festejar su noveno título antes incluso de entrar en la gira asiática: "Seguimos con la mentalidad. Quedan nueve carreras, lo importante es seguir sumando, entender siempre los límites en carrera. Al ir con tanta inercia me costará entender el día que no se pueda ganar, que llegará el día, estoy autotrabajando mucho para entender ese día que no se pueda ganar y coger puntos. Mientras dure la inercia, intentaremos seguir".
