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Ya no es solo una maqueta bonita en un estudio de diseño ni un prototipo para hacer babear a los fans: el BMW M4 CS Edition VR46 ha comenzado oficialmente a fabricarse. En la planta de Dingolfing, donde BMW pule sus joyas más potentes, han empezado a salir de la línea de montaje las primeras unidades de esta edición limitada que rinde homenaje al hombre que convirtió el número 46 en una marca global: Valentino Rossi.
Sí, ese mismo Rossi que no cambió nunca el “46” ni cuando tenía derecho a llevar el número 1 de campeón. Un detalle que dice mucho de su carácter… y del valor sentimental que hay detrás de esta colaboración. Solo se fabricarán 92 unidades: 46 en versión Sport y otras 46 en versión Style.
Y no, no se trata de una operación de marketing superficial. “El Doctor” ha metido mano (literalmente) en el diseño de ambas versiones. “Participé personalmente en el proceso de diseño”, declaró Rossi, quien eligió colores, detalles y hasta el tono de las costuras. No es casualidad que cada modelo lleve su firma y su icónico 46 grabado a fuego (bueno, pintado con mimo).
Lo que acaba de empezar en Dingolfing no es solo una producción más: es una pequeña obra de ingeniería artesanal dentro de un entorno industrial de precisión. Entre febrero y mayo, el equipo de BMW ha combinado la eficiencia de su línea de montaje con procesos manuales como la pintura a mano de elementos clave, como los laterales y el techo de carbono.
Los coches están saliendo con carrocerías que mezclan tonos metalizados como el Azul Marina Bay y el Azul Tanzanite, con gráficos XXL del número 46 en ambos lados, imposibles de pasar por alto. Incluso los frenos y detalles de las llantas han recibido una dosis de amarillo neón, el color de guerra de Rossi.
En el techo, de fibra de carbono, brilla un gigantesco logo VR46 acompañado de su firma. Todo en este coche grita “Valentino” a los cuatro vientos. Y sí, el interior también va cargadito: piel Merino en negro y azul noche, contrastes amarillos hasta en los reposacabezas y un volante M en Alcántara con detalles exclusivos. El detalle final lo pone una placa numerada “1/46” (o la que toque), para que nadie se olvide de que este no es un M4 CS cualquiera.
Por mucho que el exterior luzca como una camiseta VR46 sobre ruedas, lo que late en el interior es pura ingeniería BMW. El motor es el ya conocido seis cilindros en línea de 3.0 litros con doble turbo que sube hasta los 550 cv gracias a unos ajustes finos de presión y gestión electrónica. Acelera de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos y sigue empujando hasta los 302 km/h, limitados electrónicamente, por si alguien se atreve a pisarlo a fondo en la Autobahn.
El reparto de potencia lo gestiona la transmisión M Steptronic de ocho velocidades, junto al sistema de tracción total M xDrive y el diferencial activo, un trío que garantiza pegada y control a partes iguales.
Este arranque de producción no es casualidad: se ha sincronizado con el 46º aniversario de Rossi, y aunque la presentación del modelo se hizo en febrero, ahora es cuando se hace realidad. Ya no es solo una foto bonita, sino un coche real que está empezando a salir del horno bávaro.
Y como guinda a esta edición especial valorada en 172.000 euros, los compradores no se llevan solo un coche: también acceden a una experiencia exclusiva de dos días en Italia, con visita al VR46 Motor Ranch, barbacoa con Valentino incluida, y una jornada de conducción en Misano, donde podrán sacar músculo con los BMW M y sentirse pilotos por un día.
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Desde su retirada del motociclismo en 2021, Valentino no ha levantado el pie del acelerador. Lleva desde 2023 como piloto oficial de BMW M, compitiendo en campeonatos como el GT World Challenge Europe y el WEC. Este mismo año ya subió al podio en las 12 Horas de Bathurst, dejando claro que el talento no se queda en las dos ruedas.