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Fermín Aldeguer continúa consolidando su evolución en MotoGP tras un fin de semana intenso en el circuito de Jerez. Aunque el domingo no pudo finalizar la carrera principal por una caída, el sábado logró una destacada quinta posición en la Sprint, y el lunes, durante la jornada oficial de test, finalizó séptimo con buenas sensaciones.
"He acumulado kilómetros. Después del fin de semana el físico no estaba al cien por cien, pero estoy satisfecho con lo que hemos hecho. Hemos trabajado pensando en Le Mans y en el setting de la moto para llegar lo mejor posible a la próxima cita, aunque el trazado francés no es de mis preferidos. En general, el viento distorsionó los valores en pista y no permitió apretar al máximo, pero estoy contento", explicó el piloto de Gresini al término de los entrenamientos.
El trabajo del test estuvo enfocado en encontrar mejoras en la puesta a punto con vistas a la próxima carrera en Francia. "Como he dicho, nos centramos en el ‘setup’ y en probar soluciones diferentes respecto a lo que usamos en carrera, pero en general el enfoque fue el round de Le Mans. Hicimos algunos pequeños cambios para no perder la dirección ni las buenas sensaciones. He demostrado que soy rápido cuando aprieto, pero estoy pensando en el resto de la temporada", señaló el murciano.
Su proceso de adaptación a la categoría reina está siendo constante y sin grandes sobresaltos. Aldeguer reconoce que cada vez se encuentra más cómodo con la moto y su funcionamiento. "La experiencia ayuda, y ahora tenemos una buena base de partida. En general, entiendo mejor los frenos y la electrónica, y también mis comentarios a los técnicos son cada vez más precisos. Estoy en una buena fase, pero tengo que seguir trabajando para no perder estas sensaciones", añadió.
En cuanto a su estilo de pilotaje, Aldeguer está haciendo ajustes para exprimir al máximo el potencial de la Ducati GP24. "Estoy intentando adaptar mi forma de pilotar, tratando de mejorar el levantamiento de la moto y las trazadas. Aquí hemos sido muy competitivos, pero hay que pensar en el futuro", explicó.
A pesar de compartir box con Álex Márquez, el español dejó claro que no toma al catalán como referente técnico absoluto. "Cada piloto tiene su estilo y cada uno debe trabajar para sí mismo y en su propia dirección. Está claro que puedes hacer comparaciones, pero yo me centro en mí y no en los demás", aseguró.
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Eso sí, reconoció que su moto guarda similitudes con la que usó Marc Márquez la temporada pasada en el mismo equipo. "Debo decir que mi moto es muy similar a la de Marc Márquez, pero no porque quiera imitarlo. En MotoGP hay muchas cosas en las que fijarse, pero al mismo tiempo puedes contar con la ayuda de los ingenieros, así que al punto en el que estoy he llegado por mí mismo", concluyó el piloto murciano.
