A Mir no le cabe la sonrisa en la boca: "El equipo ha comido mucha mierda, estoy muy feliz hoy"

Javier Ortega @todocircuitoweb

Joan Mir ha arrancado el Gran Premio de Tailandia con una gran dosis de optimismo tras finalizar sexto en la jornada del viernes, metiendo su Honda RC213V directamente en la Q2 del sábado. El piloto balear ha sido la mejor Honda en pista, quedándose a 286 milésimas del mejor tiempo del día, marcado por Álex Márquez.

Después de un 2024 para olvidar, en el que le tocó pasar por la Q1 en casi todos los grandes premios, el mallorquín respira aliviado al ver que la evolución de la Honda es real. Más allá del buen resultado, Mir se mostró satisfecho con las sensaciones sobre la moto, algo que llevaba tiempo sin experimentar.

"Estoy muy feliz de poder pasar a la Q2", ha dicho este viernes. "Pero, más allá de eso, me alegra la manera en que lo hemos hecho. No me he sacado una vuelta del bolsillo, no me han cancelado tiempos y, sobre todo, entiendo lo que está pasando. Puedo sentir el neumático delantero, apretar… No sé si se ha visto en la tele, pero vuelvo a frenar y entrar en curva como me gusta, atacando delante. Hacía mucho que no podía hacerlo" explicó el piloto del Honda HRC Castrol Team.

Mir no quiso quedarse solo con su alegría personal, sino que destacó el esfuerzo de su equipo, que lleva dos temporadas peleando con una moto que no ha estado a la altura: "Muy feliz por el equipo, también han comido mucha mierda, hablando mal. No es fácil pasar dos años como estos y seguir teniendo la motivación. Estoy muy orgulloso de mí mismo, porque mantener la motivación y trabajar como he trabajado, solo lo sabe la gente que está a mi alrededor. No es fácil levantarte cada mañana con determinación y trabajar como el que más cuando las cosas no van bien. Yo lo he hecho y estaba preparado para disfrutar encima de la moto cuando pudiera hacerlo, y es lo que estoy haciendo".

A pesar del gran inicio de fin de semana, Mir prefiere no marcarse objetivos concretos y centrarse en seguir disfrutando sobre la moto: "Lo que venga más allá de todo esto, mañana o lo que sea, estará bien. Si mañana cuadramos un poco y salimos más adelante o más atrás, estará bien sabiendo de dónde venimos. Puede ser un fin de semana bueno en el que disfrutar, ese es mi objetivo".

El mallorquín tiene claro que la mejora de la Honda no es casualidad, y que los test invernales ya habían dejado entrever este paso adelante. Sin embargo, la falta de velocidad punta sigue siendo un problema grave: "No creo que sea flor de un día, es una realidad. Lo hemos hecho en los test, en el primer día aquí, todos vienen muy rodados y hemos sido rapidísimos en este primer día. La pista estaba complicada para todos, y estábamos ahí, con las motos más lentas de la parrilla en velocidad máxima por bastante. Eso quiere decir que estamos pilotando bien".

El déficit de potencia es algo que Mir lleva reclamando desde hace meses y volvió a insistir en ello: "Si soy la moto más lenta de la parrilla, con las rectas de aquí y estoy a tres décimas, y en cada recta me sacan 5 km/h... me gustaría arreglar esto y ver dónde estamos con un motor que ojalá llegue. A ver si seguimos trabajando en esta línea, que es muy buena, y en solucionar los puntos débiles, que ya dije que son gordos".

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El mayor cambio que Mir ha notado con la RC213V 2025 está en la primera fase de la curva, donde vuelve a sentirse competitivo: "Lo noto entrando en curva, frenando, estoy frenando muy tarde, entro en curva con confianza, con freno. Pierdo de mitad de la curva hacia la salida, porque tengo algo menos de grip y de velocidad punta que los demás. En ese tramo pierdo, e intento compensarlo frenando. Ahora la moto tira, abres gas un poco más suave, la moto va bien y es bastante llevable, pero le falta motor, es el talón de Aquiles".