Guerra de declaraciones entre el ex-piloto mundialista Kevin Schwantz y el duo formado por Alberto Puig y Dani Pedrosa a raíz de unas entrevista concedida por el norteamericano al diario L´Équipe. En ella, Schwantz aseguraba que "a Pedrosa no le falta nada. Incluso tiene alguna cosa de más, como Alberto Puig. Ese tipo le come la cabeza. Dani se necesita a sí mismo para alcanzar otra dimensión. Es como un niño que no llega a emanciparse porque sus padres le asfixian. Me cae bien Dani, pero hace ocho años que es piloto de la marca Honda y nunca ha ganado nada. Me gustaría que me demuestre que me equivoco, pero no creo".
La reacción no se hizo esperar por parte de Pedrosa, que defendió a capa y espada el trabajo de su manager y recordó que, si bien no ha ganado todavía el Mundial de MotoGP, aglutina otros logros que Schwantz nunca consiguió: “El trabajo de Puig es encontrar nuevos talentos y ha demostrado que sabe lo que hace y que lo realiza de forma honesta. Muchos de los pilotos a los que ha ayudado ya han sido campeones o subcampeones. Le recomiendo (-a Kevin Schwantz-) que revise las estadísticas de mi carrera y quizá luego podamos hablar. Tal vez nunca haya ganado el Mundial de MotoGP, pero tengo otros registros a los que muchos no han llegado”.
Por último, y de forma más extensa, Alberto Puig le ha escrito una carta abierta al tejano en la que no deja títere con cabeza. Recomendamos encarecidamente su lectura:
En respuesta a las declaraciones que realizó el Señor Kevin Schwantz durante el GP de Texas con referencia a Dani Pedrosa, creo justo dar mi punto de vista y opinión sobre el asunto, ya que hace alusión a mi persona.
Desde el punto de vista deportivo, me limitare única y exclusivamente a las estadísticas y a la hemeroteca, así que estaremos hablando de datos objetivos 100%, no de opiniones o pensamientos de alguien que años atrás estuvo aquí. El Señor Schwantz dijo textualmente que en "8 años Dani Pedrosa no había ganado nada".
Bien, vamos a analizarlo. Para empezar, tengamos en cuenta que Pedrosa tiene de momento 3 títulos mundiales (1 en 125cc. y 2 en 250cc.) por 1 de Schwantz en 500cc. No tengo la menor duda, porque he sido piloto de 500cc, de que el título de 500cc es mucho más importante que los de las otras categorías, cierto, pero lo que tampoco se puede hacer es desmerecer esos 3 títulos logrados por Dani en esas categorías intermedias. Por Dani y por todos los pilotos que a lo largo de la historia del Mundial de Motociclismo han conseguido títulos en estas categorías. Todos ellos fueron, seguro, unos grandes campeones, sin importar la cilindrjada en la que lo consiguieron. Y todos merecen un respeto.
Por citar algún dato, podríamos decir que Pedrosa tiene un total de 45 victorias en Grandes Premios, mientras que el tejano 25 (casi el doble). De esas 45 victorias de Dani, 22 han sido en la clase reina. Añadir también que Pedrosa tiene en su haber 113 podios -72 en MotoGP por 51 de Schwantz- y 55 vueltas rápidas (35 de esas 55 en MotoGP) -por 26 de Schwantz-.
Si nos remitimos a los datos -claramente a favor de Pedrosa-, decir que Dani no ha ganado nada en 8 años es propio de alguien que no sabe lo que dice y sobre todo, es muy poco respetuoso.
Pero aún y así, Señor Schwantz, le voy a dar algo de razón, Dani todavía no ha ganado el título de títulos, cierto. Pero en ello está, y está a pesar de las muchas adversidades con las que se ha encontrado en su carrera; y me refiero a lesiones. Le recuerdo que usted hizo las maletas y se fue para casa porque tenía muy mal su muñeca; pues este piloto tiene mal casi todo el cuerpo y sigue dándole al gas.
Sr. Schwantz, Dani no ha ganado este título todavía, pero deje que le diga una cosa que no le va a gustar, y se la voy a decir por su prepotencia y porque es así como sucedió. Usted sí tiene ese título -tardó 8 años en conseguirlo desde su primera carrera en el 86-, pero lo ganó únicamente porque Wayne Rainey se accidentó en Misano y tuvo que dejar de competir ese año; si no, usted no gana ese título casi ni por casualidad. Fue usted un gran piloto, súper espectacular también, pero remitiéndome a los resultados, usted siempre estuvo a la sombra, primero de Eddie Lawson, y después permanentemente a la de Wayne Rainey, de manera constante. Así que no alardee tanto de campeón, que le fue justito a usted el tener ese título.
En cuanto al tema que comenta de que Dani necesitaría haber crecido sin nadie a su lado -se referirá a mi-, recordarle que en la época de los ‘80 y ‘90 cuando el Señor Schwantz corría, era curioso ver su manera de funcionar en su trabajo, ya que mientras la mayoría de jóvenes viajábamos por Europa y por el mundo como podíamos, siempre con algún amigo o algún acompañante, él no daba un paso sin tener a sus padres (a los dos) a su lado. La verdad es que era atípica en aquel momento esa manera de funcionar, daba la imagen de niño mimado que necesita a los papas todo el día cerca de él. Según sus palabras, en referencia a mi persona, y según como el actuó, entonces, ¿se podría interpretar que de no haber tenido a sus padres todo el día a su lado, protegiéndole, hubiera conseguido más títulos? Reflexione usted, Señor Schwantz.
Al margen de esto, decirle que desde que me retiré de la competición he trabajado muy duro en el tema de la promoción de pilotos, básicamente con Dani Pedrosa, pero también he ayudado y dirigido en ciertos momentos de mi carrera a pilotos como Casey Stoner, Toni Elías, Álvaro Bautista, Marc Márquez y Julián Simón. Y todos ellos, todos, han sido Campeones del Mundo.
Usted, Señor Schwantz, tiene una escuela de pilotos en Texas hace años y ayuda a chavales con todo esto de la competición; a día de hoy, ni uno de sus pilotos, ni uno, ha conseguido ni tan siquiera clasificarse para venir a correr a Europa. Nada de nada. O sea, en este terreno, cero éxito.
Señor Schwantz, usted igual no recuerda este episodio -porque seguro que vivió muchos como este-, pero yo no tantos así, que lo recuerdo con claridad.
En el año 1994, tuve el honor de compartir podium con usted y con Michael Doohan en Hockenheim, en aquel fascinante y brutal circuito. Doohan, a las pocas vueltas se marchó, y yo tuve el honor de pelear con usted por el segundo puesto del podio. Usted me batió claramente y lo hizo porque usted era mucho mejor que yo. Pero recuerdo que en aquella carrera mi Honda era más rápida que su Suzuki, y yo aprovechaba su rebufo para pasarle en las largas rectas del bosque, hasta que llegábamos a las chicanes o al estadio y ahí, en la frenada, me pasaba. Faltando unas vueltas para acabar me paso muy fuerte en una frenada; en aquel momento comprendí que se iba a ir sólo y que yo no podría seguirle, lo maldije dentro de mi casco pero al mismo tiempo pensé "joder, que tío tan bueno, como puede frenar tan tarde". Al acabar la carrera, en el pódium, cuando nos felicitamos, sentí un gran respeto y admiración por usted, por un hombre que me acababa de enseñar cómo se puede frenar al límite con una moto de competición.
Siento con tristeza decirle que después de leer su artículo, el cual considero está lleno de faltas de respeto a un gran campeón como ha sido Dani Pedrosa y a otros muchos hombres que han logrado títulos en categorías intermedias, ese respeto que nació aquel frío día en Hockenheim ‘94 ha desaparecido por completo.
Kevin, en su momento ganaste el título de 500cc, pero hasta los campeones se equivocan y deben saber rectificar cuando la ocasión lo requiere”.
