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A Marc Márquez se le ha complicado el fin de semana. Al principio se lo complicaba él con una dura caída durante los entrenamientos libres, y hoy, ya en la sesión Q1, se lo complicaba Stefan Bradl. Una serie de acontecimientos ha propiciado que el 93 no sea capaz de cronometrar bien y tenga que salir desde la 13ª posición para las dos carreras programadas este fin de semana.
Lo que sucedía es que durante la Q1, y tras haber superado el ecuador de la sesión, el 93 volvía a pista, pero regresó inmediatamente al box sin completar un giro. Salió de nuevo, a los minutos, pero era para jugárselo todo a una vuelta… Y fue cuando Stefan Bradl entró en acción y le perjudicó.
El alemán se entrometió en la trazada del 93 al cruzar de izquierda a derecha entremedia de la curva uno y dos, obligando a Márquez a clavar frenos y pifiarle su único intento de vuelta rápida. Así que al final, el Panel de Comisarios sancionó al de Honda con tres vueltas para la carrera dominical. Pero fue tan lento que eso no le afecta, y saldrá penúltimo.
A pesar del encontronazo, Bradl fue consciente de lo que hizo, por eso nada más terminar la sesión, se acercó a Marc, todavía en pista, y le pidió disculpas. Márquez, en vez de aceptar las disculpas, hizo aspavientos con los brazos a modo de queja.
Luego, ya ante los micrófonos, Marc Márquez primero comentó sobre su estado físico que estaba “bien, a ver si no se complica el dolor”, y al ser preguntado sobre el incidente con Bradl, tiró de sorna e ironía: “Yo le he dicho al equipo, no hace falta que lo sancionen, ya está atrás, o sea que…”, dejaba caer el 93 con un tono bastante irónico.
Más serio, mencionaba creer que Bradl “no lo ha hecho queriendo, ha venido y me ha pedido disculpas, esto pasa, es un circuito muy pequeño y evidentemente en ese punto he tenido un problema con la moto en la vuelta anterior y no he podido confiar en lo que haría. Pasa. Me ha pedido disculpas, no pasa nada”.
Pero quizá su última frase fue la más lapidaria: “A los alemanes les ganamos ayer”, bromeaba el 93 en referencia al partido que jugó ayer la Selección Española de fútbol contra la alemana, y ganó en la prórroga. Con ello pretendía aludir a la nacionalidad de Bradl, piloto de nacionalidad alemana, natural de Augsburgo.
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Márquez, como ya ha confirmado en muchas ocasiones a través de sus declaraciones y redes sociales, es un gran fanático del fútbol, y de la Selección Española. Ha compartido en varias ocasiones fotografías vestido con la camiseta nacional, en compañía de su hermano Álex e incluso de Carlos Sainz, piloto de Fórmula 1, y también gran seguidor de ‘La Roja’, que por cierto, ya ha pasado a semifinales de la Eurocopa.