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Día plagado de problemas para Marc Márquez en su primer día con la Ducati GP23 del equipo Gresini este año. El piloto de Cervera completaba la jornada inaugural del test oficial IRTA de MotoGP marcando el noveno mejor tiempo del día, a seis décimas de la moto de Jorge Martín, un registro que el #93 estableció en su última salida a pista y con neumático blando, en una de las pocas tandas que pudo completar este martes tras verse obligado a parar su Ducati hasta en cuatro ocasiones.
El ocho veces campeón del mundo se tomaba con humor lo ocurrido hoy en Malasia, un día en el que, dice, "he vuelto cuatro veces al box por el vial, y eso es algo que normalmente no pasa". Además, Márquez ha aclarado que la supuesta caída que ha registrado el sistema de cronometraje en la curva número 15 (la última), no ha sido tal, por lo que el catalán todavía mantiene a cero su contador de percances con la Desmosedici: "Me han contado una caída en la curva 15 cuando no me había caído, simplemente había tenido también ahí un problema técnico", ha aclarado.
Pese a los problemas, el buen humor parece reinar en el box del Gresini Racing; Marc no oculta que "ha habido un poco de cachondeo dentro del box, porque dicen que todos los problemas que podían salir en el primer día han salido en mis dos motos", y cree que lo importante es comprobar que "el equipo ha reaccionado muy bien", así que está tranquilo en ese sentido.
Tantas paradas en el box y el hecho de haber tenido que esperar a que solucionaran algunos de los fallos de sus motos ha impedido al mayor de los Márquez "coger ritmo", y no ha sido hasta la tarde cuando ha podido "hacer dos salidas medio normales y ahí ya me he ido encontrando mejor, pero aun con mucho trabajo por hacer", logrando además su mejor registro del día a dos vueltas de finalizar la jornada.
El #93 considera que su nuevo staff técnico "enseguida identificaba el problema" y lo solucionaban en cuestión de minutos, y agradece el apoyo que los ingenieros de Ducati le han prestado por la mañana, entre ellos el propio Gigi Dall'Igna: "Han estado muy pendientes, el electrónico es de Ducati y venían rápido los ingenieros de Ducati cuando aparecían los problemas".
Sobre la moto, lamenta "no poder decir" demasiado al haber dado tan pocas vueltas (47 hoy): "La sensación no era la mejor al no poder dar vueltas y no poder coger ritmo. Malasia es una pista que no me sale fácil. Tengo que entender más, sobre todo el tren delantero", apunta un Márquez que también ha protagonizado su primera salvada sobre la Desmosedici: "He tenido una salvada cuando entraba a box. Hay unos secretillos con la Ducati que tengo que ir aprendiendo. Ha sido error mío e inesperado, porque no estaba tirando".
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De momento, Marc va avanzando de puntillas y dando pasos seguros en su entendimiento con la Desmosedici GP23. Su plan para estos días de test pasa por "adaptarme yo a la moto, entender el tren delantero, sobre todo, que es lo que más cambia respecto a la Honda, y también empezar a probar cosas de puesta a punto, que de momento no lo hemos hecho", y se muestra satisfecho por haber dado algunas vueltas con gomas usadas "y una buena vuelta" en el time-attack que le ha metido en el top 10.
