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Marc Márquez completó una carrera discreta y de más a menos en Losail. Una vez más, el #93 se estuvo codeando con los pilotos de cabeza durante los compases iniciales de la carrera de MotoGP del Gran Premio de Qatar, ascendiendo hasta la quinta plaza nada más apagarse el semáforo; a partir de ahí, el catalán no pudo ir a más, y poco a poco fue perdiendo posiciones hasta consolidarse en la 11ª plaza, a rueda de Jorge Martín.
Marc se tiró media carrera detrás del madrileño, y después de tener sus más y sus menos con el escudero de Jorge, el francés Johann Zarco, Márquez acabó superando al galo y dio por buenos los cinco puntos de la 11ª posición, sin entrar en trifulcas con el piloto del PRAMAC Racing consciente de lo mucho que se estaba jugando Martín en Qatar.
Tras ver la línea a cuadros, Márquez confesó que el fin de semana había ido "mejor de lo esperado" después del fiasco del viernes, que vio a todas las Honda en las últimas posiciones de los primeros entrenos cronometrados. El #93 no oculta que "tanto en la sprint como en la carrera larga el ritmo te pone en su sitio", y además a eso hay que sumar que el propio Marc no se encontraba "del todo fino" el domingo, sin las sensaciones que tuvo sobre su Honda en la jornada del sábado.
Márquez fue testigo privilegiado de la mala carrera que protagonizó Jorge Martín a causa de unos Michelin que traicionaron al de PRAMAC; por lo que pudo ver Marc, Martín "estaba sufriendo demasiado a la salida de las curvas" respecto a las Ducati que marchan por delante, consciente de que un problema así deriva de una "falta de tracción" que condenó por completo al madrileño.
Pese a que estuvo más de media carrera pegado al colín dela Ducati del #89, el de Cervera optó por no intimidar al de San Sebastián de los Reyes porque "no me cambiaba la vida y a él sí que le puede cambiar estos puntos que ha conseguido", optando por no inmiscuirse en el duelo Martín-Bagnaia que se decidirá en Valencia.
Preguntado por los problemas que tuvo Jorge Martín con sus neumáticos y las críticas vertidas por el madrileño por la falta de estabilidad en los procesos de control de calidad que ofrece Michelin, Márquez optó por ser cauto y afirmó que, para él, los neumáticos "están a la altura del campeonato", aunque no oculta que "en alguna carrera le tocará a otro, pero para mí los neumáticos van demasiado bien" y ve como algo normal que, puntualmente, salgan neumáticos "un poquito peores" y eso "se note mucho" cuando estás sobre la moto.
Sobre la victoria de Fabio Di Giannantonio con la moto y el equipo al que Marc Márquez se trasladará dentro de una semana, el catalán solo puede "felicitar" al italiano porque, dice, "está dando lo mejor de sí cuando más lo necesita". El de Honda cree que 'Diggia' ha sacado su velocidad "a partir de los rumores" que vienen circulando sobre él desde hace semanas, y le define como "un piloto con talento", recordando que este tipo de situaciones "han pasado muchas veces ya en el Mundial, pilotos con talento han de estar en el sitio y tener el resultado en la situación adecuada", puntualizando que él intentará "hacer también un buen trabajo allí" sobre una moto que ya ha demostrado ser ganadora, incluso siendo una versión antigua.
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Marc afrontará su último baile con Honda dentro de unos días, en Valencia, donde tratará de "intentar acabar bien" y dar "el 100%" en un circuito que "le gusta" y en el que ya sabe lo que es subir al escalón más alto del podio. El ocho veces campeón del mundo ocupa actualmente la 14ª posición de la general con 89 puntos, y en función de su resultado en Cheste podría superar a Franco Morbidelli (13º 93p.), que le precede con cuatro puntos de ventaja.
