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Jorge Martín ha perdido una oportunidad de oro para hacerse con el título de MotoGP. Un fin de semana muy extraño en el que incluso el piloto y otras voces han leído entre líneas lo que ha sucedido. Si ayer él dominaba en la carrera al sprint donde se jugaban menos puntos y ganaba, mientras que Bagnaia era incapaz de luchar, hoy la situación era completamente la inversa.
El piloto español ha pasado por línea de meta en la 10ª plaza, mientras que Bagnaia lo hacía el 2º. Eso ha dejado una ventaja de 21 puntos a favor del italiano respecto al español, y Jorge Martín no traía cara de hacer amigos, y tiraba de ironía para referirse a una desesperante carrera que le ha sacado de sus casillas. “Al final iba incluso riéndome”, resumía muy bien.
"Creo que se ha visto clarísimo que estaba condenado, cuando la goma empieza a derrapar en la salida algo no va bien. Eso suele pasar cuando la goma no tiene agarre, cuando la goma tiene 30 vueltas, y la mía pues no las tenía”, arrancaba el de San Sebastián de los Reyes, que sufría un derrape inicial que le lastró en los primeros giros.
QUÉ MIEDO 😰
— DAZN España (@DAZN_ES) November 19, 2023
Jorge Martín estuvo a punto de caerse en plena recta cuando su moto se descontroló completamente #QatarGP 🇶🇦 #MotoGP 🏁 pic.twitter.com/ssisPmJBJs
Martín narra cómo “luego he estado bastante tranquilo las primeras dos o tres vueltas, digo, ‘bueno, voy a guardar goma’ porque pensaba que iría bien, pero en cuanto he apretado un poco para intentar bajar esos 53 no había grip, no podía parar la moto”. Eso le ha llevado a decir que “ha sido una vergüenza la verdad pilotar así”, expresando “mucha frustración en algún momento”, incluso narrando cómo “al final iba incluso riéndome porque no era mi culpa”.
Martín ha sido muy claro sobre sus sensaciones: “Ayer ya demostramos en la sprint que tenía ritmo para ganar y hoy rodando un segundo y medio más lento con una goma que no funcionaba, es una vergüenza”, atacaba directamente.
Una situación que le “frustra mucho”, pero intenta sacar petróleo del panorama general: “Me hubiese frustrado más que me hubiesen ganado en pista, y hoy no ha sido así”. El del Prima Pramac ha atizado a diestro y siniestro: “Otra vez me han ganado fuera, es que no sé mucho qué decirte, creo que el nivel de los neumáticos tiene que subir mucho, no puede ser que se decida un mundial de MotoGP por una goma que no funciona, y casualidad que solo le ha tocado a uno de los contendientes al título, el resto de pilotos iba bien en cuanto a gomas”.
Si bien no lo da todo por perdido, el tono triste prevalece en el español: “Veremos en Valencia, confió hasta el final, voy a intentarlo hasta el final, pero no hubiese llegado en esta situación si no hubiese sido por esta goma. Me da pena y rabia después de un año peleando, y creo que se ha definido mucho quién ganará este campeonato”, arrancaba.
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Tampoco ha dejado de lado la hipótesis de un posible sabotaje: “No sé si es casualidad. No digo que sea a propósito, pero está claro que ni ellos entienden por qué pasa, pero pasa. Me da rabia que sea a mí porque estoy peleando por el título y ya se ha decidido el mundial. Espero que no haya sido a propósito y que mejore para que no le pase a nadie más. Son las condiciones que tenemos y habrá que intentar defenderlas”.