 Redacción @todocircuitoweb |
Silverstone ha demostrado que los cambios introducidos por Honda a lo largo del parón estival no han servido para nada. Lejos de dar ese paso adelante que esperan sus pilotos, la de Gran Bretaña ha vuelto a ser una ronda de sufrimiento para los integrantes de HRC, especialmente durante la jornada de clasificación del sábado, donde ninguna de las cuatro RC213V de la parrilla fue capaz de pasar a la Q2.
El piloto mejor posicionado en la salida del GP de Gran Bretaña fue Alex Márquez, que partió 17º, un resultado que da a entender los problemas que están teniendo en Honda para hacer un buen qualifying los sábado y no tener que salir desde posiciones tan retrasadas. Y es que, con 1,5 segundos de diferencia respecto al tiempo de la pole establecido por Pecco Bagnaia, a nadie se le escapa que esta Honda no funciona a una vuelta.
Como ya es habitual en las últimas carreras, Alberto Puig hizo un análisis personal de lo ocurrido en Gran Bretaña, "de nuevo un fin de semana infructuoso para nosotros" resume el patrón del Repsol Honda Team, cuya fábrica se sitúa a la cola de la la clasificación del mundial de constructores.
"Todavía no pudimos deshacernos de los problemas que tenemos y está afectando nuestro rendimiento y limitando el potencial de nuestros pilotos. Continuamos en la búsqueda de estas nuevas piezas que puedan ayudarnos a volver a la normalidad y rendir como estamos acostumbrados a hacerlo", afirma Puig pese a que, según declaró Stefan Bradl en Silverstone, HRC ya está centrada por completo en la Honda de 2023.
Puig lanzó un mensaje alto y claro a Japón: la moto de este año no es competitiva los sábados, y eso condena las opciones de sus pilotos el día de la carrera. "Si comienzas desde la quinta o sexta fila de la parrilla en este campeonato, tus posibilidades de hacer una buena carrera son muy bajas porque pierdes mucho tiempo al principio", insiste el expiloto catalán.
"No puedes adelantar y, por lo tanto, si no estás rindiendo en la sesión de clasificación, no puedes obtener una buena posición en la parrilla, y todo es difícil. Así que finalmente, todo es una consecuencia de esto y la carrera es el resultado final. Claramente, tenemos que mejorar el sábado", remarca Puig, que está viviendo los peores años de la marca del ala dorada en MotoGP.
Pese a que Pol Espargaró -que acabó 14º- fue cinco segundos más rápido en comparación a la carrera del año pasado, para Puig esto no significa nada: "No diría que esto es positivo. Creo que todavía tenemos que encontrar una manera de mejorar el sábado, para que no estemos empezando las carreras desde tan lejos. Entonces podríamos tener algunas opciones más, pero es complicado".
La cita de Gran Bretaña coincidió con otra carrera importante para Honda, las 8 Horas de Suzuka, donde el Team HRC de Iker Lecuona se alzó con la victoria, algo que no sucedía desde 2014. El mandamás del Repsol Honda Team cree que este triunfo "es importante y estamos muy contentos con esta victoria en Suzuka", aunque a la vez recuerda que lo importante ahora "es que seguir pensando en Gino Rea y estamos muy tristes por su accidente, y esperamos que pueda recuperarse".
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Con ocho carreras por delante, parece complicado que Honda sea capaz de darle la vuelta a la tortilla, especialmente ahora que todos sus ingenieros en Japón están centrados en la moto del próximo año. En cualquier caso, Alberto Puig recuerda que "estamos en MotoGP y nuestro deber es volver a ser competitivos y traer una moto que pueda empezar a ganar carreras", algo que no sucede desde octubre del año pasado, cuando Marc Márquez se impuso en el Gran Premio de la Emilia Romaña.
