 Redacción @todocircuitoweb |
Ducati todavía no ha configurado su ejército de pilotos para 2023. El fabricante de Borgo Panigale volverá a desplegar hasta ocho Desmosedici en pista la próxima temporada, y a día de hoy sólo uno de ellos tiene su asiento garantizado en las dos estructuras en las que la fábrica italiana tiene poder decisión a la hora de configurar sus boxes: el Ducati Lenovo Team y el Prima PRAMAC Ducati.
Tras la reciente renovación de Pecco Bagnaia, Ducati ha puesto en marcha un baile de sillas cuya música todavía está lejos de parar, especialmente después de que Joan Mir y Alex Rins entraran inesperadamente en el mercado de fichajes tras el reciente anuncio por parte de Suzuki de no seguir compitiendo en MotoGP la próxima temporada.
En Borgo Panigale ya tienen asumido que Jack Miller vestirá de naranja a partir de 2023. El australiano se está dejando querer por KTM para ser el compañero de Brad Binder durante las dos próximas temporadas, un acuerdo en el que parece primar el sueldo que percibirá Miller por encima del paquete técnico que podrán ofrecerle los austriacos, que ahora mismo están un peldaño por debajo respecto a Ducati a nivel de rendimiento.
La gran pregunta que se hace todo el paddock desde que arrancó este curso 2022 sigue siendo la misma, ¿quién acompañará a Pecco Bagnaia la próxima temporada? Si miramos la clasificación, la respuesta puede parecer sencilla: Enea Bastianini, autor de tres victorias este año, marcha tercero en la general y está a 28 puntos del líder Fabio Quartararo, y mucho más atrás, 15º con 31 puntos, encontramos a un Jorge Martín que está siendo una sombra del piloto que fue en 2021.
En Ducati son conscientes del potencial del madrileño y de los problemas que ha tenido en este arranque de 2022 con una GP22 a la que no ha sido fácil adaptarse. A estos problemas hay que sumar la lesión que el #89 arrastra en su mano derecha desde la caída que sufrió en Portimao el año pasado y de la cual se operará este próximo lunes en Italia con la esperanza de llegar a la próxima carrera de Sachsenring totalmente recuperado y en su mejor nivel de forma.
Lejos de precipitarse en su decisión, y quizás aprendiendo de los errores del pasado -difícil no acordarse de lo ocurrido con Jorge Lorenzo en 2018-, la marca transalpina ha decidido retrasar su decisión sobre qué piloto ascenderá al Ducati Lenovo Team hasta el parón estival, dándole a Jorge Martín tres carreras de margen -Catalunya, Alemania y Assen- para que demuestre su valía frente a Enea Bastianini.
Así lo confirmaba este mismo sábado Paolo Ciabatti al micrófono de DAZN: "Siempre hemos dicho que el objetivo era tener a Jorge y Enea en Ducati los próximos dos años. Creo que lo hemos conseguido, vamos a tomar una decisión para el equipo oficial un poco más tarde, porque también sabemos que Jorge no está perfecto físicamente, y queremos ver unas pocas carreras más después de su operación".
Según se desprende de las palabras del director deportivo de Ducati, el PRAMAC Racing mantendrá a Johann Zarco en sus filas al menos una temporada más: "PRAMAC quiere seguir con Zarco, que lo está haciendo bastante bien", dice Ciabatti, dejando caer que Alex Rins o incluso Joan Mir podrían acabar subidos a una Desmosedici en 2023 para ocupar el vacío que dejarán o bien Martín en PRAMAC o Bastianini en el Gresini Racing.
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"Todos saben que, desafortunadamente, es casi seguro que Jack (Miller) no estará con nosotros el próximo año. En el equipo de Gresini estamos hablando un poco con ellos, hay pilotos interesantes que, por la decisión de Suzuki, están en el mercado. Lo valoramos con ellos, creo que tendremos que esperar algunas semanas para ver quién será el piloto de Gresini", concluye Ciabatti.
