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Álex Márquez está listo para arrancar la que será su tercera temporada consecutiva en el Mundial de MotoGP. El piloto de Cervera afronta este nuevo curso cargado de ilusión y ganas, sobre todo después de comprobar en los últimos test de Sepang y Mandalika que la RC213V 2022 ha solucionado la mayoría de problemas que tantos quebraderos de cabeza le dieron a los pilotos de HRC a lo largo del curso pasado, especialmente en lo que respecta al grip del neumático trasero.
Para el #73, la de 2022 será una temporada en la que tendrá que ganarse un puesto en la parrilla del próximo año. Su contrato con Honda expira el próximo 31 de diciembre, y el de Cervera es plenamente consciente de que sus resultados y su velocidad durante la primera parte de este curso serán determinantes para asegurarse una moto competitiva en 2023, ya sea en el LCR Honda o en otra fábrica distinta.
Desde Qatar, Álex Márquez ha ofrecido una interesante charla con la prensa especializada en la que ha tocado diversos temas.
Está tranquilo sabiendo que su futuro está en sus manos: "La vida es así, es algo con lo que tienes que vivir. Es un deporte en el que se vive el presente, no el pasado, y nunca sabes cómo irá el futuro. Pero así es la vida normalmente, en el mundo normal hoy estás aquí y mañana no sabes dónde estarás. Aquí es igual. Tengo la suerte de que el futuro está en mis manos y depende de mí. Tengo la capacidad para demostrar de lo que soy capaz, intentaré disfrutar, empezar bien la temporada e intentar firmar un buen contrato para el próximo año o las dos próximas temporadas, es el objetivo principal. Repito, depende de mí, está en mis manos, es mi oportunidad para demostrar mi potencial y merecer un buen asiento".
Le preguntan por los cambios que ha sufrido la Honda 2022: "La moto es completamente diferente, no se parece en nada a la moto del año pasado. Todavía tenemos que descubrir muchas cosas, probar muchos setups, durante la temporada iremos cambiando la configuración. Estoy seguro de que la moto y el setup con el que arrancamos en Qatar será muy diferente al de final de año, porque tenemos que descubrir muchas cosas. Pero sí, la moto es mejor, el grip trasero nos soluciona muchos problemas. Cuando no lo tienes el giro es una mierda, la frenada es muy mala... todo es más difícil. Con grip trasero todo es mejor".
Honda ha acertado cambiando la moto este año: "Creo que era el momento correcto para hacer el cambio. En 2020 no tenía sentido cambiar porque Honda venía de ganar muchas carreras con Marc, y la moto funcionaba. El 2020 no fue tan malo, en las últimas carreras pude subir dos veces al podio y ser rápido en mi año de debut. Pero es cierto que en 2021 muchas fábricas dieron un paso adelante y nosotros estuvimos más limitados, ahora creo que es el momento correcto para hacer este cambio radical, no es algo habitual en Honda".
Confía en que la Honda funcione bien en Qatar, aunque no lo sabrá hasta el viernes: "Es difícil decir cómo irá la moto en parado. Ahora tenemos una moto más tipo Ducati por decirlo de alguna manera, más de su estilo, y aquí funcionaron muy bien, sobre todo porque tenían mucha velocidad punta, también será interesante ver dónde estamos nosotros aquí, con una recta tan larga, en velocidad punta, y qué podemos extraer del motor de este año".
Le gusta llegar a Qatar sin haber hecho un test aquí: "Más que goma en pista y que esté limpia, que siempre es importante, es el no tener referencias. Eso creo que hará que cambie más. Normalmente soy un piloto que cuando llego a los circuitos me puedo adaptar bastante rápido, por eso estoy contento de que no haya habido test antes aquí, que sea directamente carrera, eso hace que se intensifique la faena, me gusta muchísimo el probar cosas durante el fin de semana, neumáticos... me gusta y me motiva. Cuando vienes de un test ya lo tienes todo tan claro que de alguna forma se vuelve un fin de semana de monotonía".
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Se traslada a Madrid temporalmente junto a su hermano Marc: "Un cambio siempre da motivación, nuevos aires siempre va bien. Sólo llevamos allí una semana, nos estamos adaptando. Con la misma rutina que en casa, eso no lo hemos cambiado, intentamos hacer un estilo de vida completamente igual. Muy a gusto, eso es importante. Un cambio siempre va bien, motivación. Le puede ir bien a él (Marc) y también a mí. Mi padre ha venido, pero él estará en Cervera. Papá y mamá irán, vendrán, ya sabes (risas)".
