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Tito Rabat califica sus cuatro primeras rondas en el Mundial de Superbikes como "muy malas". El piloto catalán no está teniendo el debut que esperaba dentro del mundial de motos derivadas de serie, un paddock en el que sigue sin encontrarse cómodo al manillar de su nueva Ducati Panigale V4 R; así lo demuestran los 18 puntos que Tito sólo ha conseguido sumar en 12 carreras, consiguiendo en Estoril su mejor resultado del año con una novena posición.
El piloto del Barni Racing Team ha tenido la oportunidad de valorar este discreto arranque de temporada en una entrevista ofrecida a WorldSBK.com en la que Tito no oculta su malestar por lo mal que ha empezado en este paddock: "Pocas valoraciones puedo hacer, sólo hemos podido acabar una carrera… no puedo decir mucho de positivo. Lo importante es mantener la calma y continuar trabajando", asegura el barcelonés.
Más allá de su falta de competitividad, lo que preocupa a Rabat es no ver avances a medida que pasan las carreras: "Al principio empezamos con muchos problemas y las dos últimas pistas se nos han atragantado, Misano todavía no entiendo por qué. Después hicimos un test allí que fue bastante mejor, y en Donington no se pueden sacar conclusiones buenas. Hay que esperar un poquito, tener paciencia e intentar sacar el máximo provecho de cada fin de semana".
Rabat no alcanza a comprender que, lejos de dar pasos adelante, su velocidad con la Panigale va disminuyendo carrera a carrera. De hecho, desde su novena posición en la Race 1 de Estoril, no ha sido capaz de volver a meterse en el top 10 en ninguna de las carreras que han disputado desde el 30 de mayo.
"A la vista está, para estar delante nos falta cada vez más. En Alcañiz estábamos más cerca que aquí", lamenta el español. "Tengo poco que decir, hemos de hablar seriamente, está claro que está siendo un principio de temporada malo, muy malo, ni de coña se ve reflejado aquí en la pista el trabajo que hago en casa, y no queda otra que armarse de paciencia y tener calma".
A pesar de la situación tan complicada que Tito atraviesa a nivel deportivo, el piloto de 32 años afirma estar acostumbrado a atravesar momentos difíciles y asegura seguir con la moral intacta: "Uno se acostumbra con el paso de los años, si no salen los resultados encuentras la motivación en casa para llegar al circuito motivado, sales de aquí intentando no irte desmotivado y seguir. Sobre todo se trata de tener mucha seguridad en uno mismo porque al final es lo más importante. Yo sé que voy rápido y estoy al 100% de mis posibilidades en todo, y poca cosa más".
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El Mundial de SBK visitará los Países Bajos en un par de semanas, una cita en la que Rabat no tiene depositadas muchas esperanzas, consciente de que el particular trazado de Assen nunca se ha adaptado a la Panigale: "No espero nada para Assen. Espero llegar fuerte, como he llegado aquí, trabajar calmado como he trabajado aquí, y seguir con esta mentalidad tanto si sale bien como si sale mal. Hay que intentar poner todo en el sitio. Seguir intentándolo pase lo que pase".
Por último, a la pregunta de qué le parece la situación actual del WSBK con Toprak Razgatlioglu y Jonathan Rea luchando cara a cara por el título, Rabat confiesa no ver las carreras en casa por falta de ganas: "Me gustaría tener fuerzas para ver las carreras, pero la verdad es que no me apetece. Me apetece hacerlas y ver si puedo estar un poquito más adelante", concluye el #53 del Barni Racing.