 Redacción @todocircuitoweb |
Raúl Fernández está siendo el fenómeno del año en Moto2. El piloto madrileño está haciendo algo que parecía casi imposible en categoría intermedia: ser competitivo desde la primera carrera y estar luchando por el título con pilotos mucho más veteranos que él, una situación muy poco habitual en Moto2.
Todos los pilotos que han sido campeones de Moto2 y que actualmente compiten en MotoGP necesitaron como mínimo una temporada completa en la clase intermedia antes de subir al primer escalón del podio. Raúl, sin embargo, lo hizo en su tercera carrera, en Portimao, y lo repitió después en Le Mans, además de sumar podios en Doha y Mugello.
Sólo la regularidad de su compañero Remy Gardner ha evitado que Fernández llegara este fin de semana a tierra española consolidado como líder de Moto2. El australiano ya tiene cerrado su futuro con el Tech 3 KTM para debutar en MotoGP el próximo año, mientras que el piloto madrileño todavía está a la espera de saber si repetirá curso en Moto2 o bien acompañará a Gardner en su camino a MotoGP, ya sea dentro de KTM o bien con otra fábrica.
En Barcelona, Aki Ajo dejó claro ante los micrófonos de DAZN que todavía no era el momento de hablar sobre el futuro de Raúl Fernández ni de Pedro Acosta, insistiendo en que ambos deben centrarse en mantener su excelente nivel hasta final de año y dejar que sean sus representantes los que se encarguen de definir las condiciones de sus próximos contratos.
Como es lógico, el meteórico debut de Raúl Fernández en Moto2 ha hecho que muchas fábricas de MotoGP llamen a su puerta para tantearle y saber cuáles son sus intenciones. Según publica Motorsport.com, Yamaha está siendo con diferencia la más insistente, especialmente después de que Lin Jarvis y el propietario del equipo Petronas, el malasio Razlan Razali, se vieran con el entorno de Fernández en Montmeló para ver qué opciones hay de cara a 2022.
Fichar al madrileño no es fácil en término económicos. Al igual que ya sucediera con Jorge Martín, el contrato de Raúl Fernández incluye una cuantiosa cláusula económica en el caso de que el piloto español decida dar el salto a MotoGP con un prototipo distinto a la RC16, un dinero que en este caso debería abonar la fábrica que contrate sus servicios.
Leer también: Viñales aclara sus últimas declaraciones: "Confío mucho en Yamaha y en el proyecto"
El acercamiento de Yamaha a Raúl no es más que un primer contacto para entender la situación y poder definir una estrategia. Antes de optar por este camino, Petronas necesita saber qué pasará con Valentino Rossi; el #46 anunciará su decisión de abandonar o seguir en 2022 durante el parón que sufrirá el campeonato en el mes de julio, y viendo lo que está pasando este año y lo difícil que le está resultando meterse en la zona de puntos cada fin de semana, cada vez parece más claro el adiós del piloto de Tavullia.
En el caso de que 'Vale' decida marcharse, Franco Morbidelli promocionaría dentro de Petronas y se convertiría en su piloto de referencia. El italo-brasileño ya ha repetido en varias ocasiones que seguirá siendo piloto de Petronas en 2022, y aunque mostró sus dudas sobre la posible continuidad del equipo malasio con Yamaha, ahora parece que las posiciones entre Jarvis y Razali están más cerca que nunca para mantener su relación.
Y ahora mismo, el piloto que parece estar mejor posicionado para ser su compañero de equipo parece ser Raúl Fernández, aunque Petronas también tiene un 'Plan B' que pasaría por promocionar a alguno de sus pilotos de Moto2 siguiendo la filosofía del equipo. Para Dorna, la idea de ver a Jake Dixon compitiendo en MotoGP en 2022 sería una buena noticia ahora que la categoría reina se ha quedado sin pilotos británicos, y aunque a muchos nos gustaría ver a Xavi Vierge subido en la Yamaha de Petronas, parece que el británico tendría prioridad en el caso de la opción de Fernández no salga adelante.
