 Redacción @todocircuitoweb |
Cal Crutchlow tomará el camino que ya cogieron Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo a finales de este año. El piloto de Coventry cerrará su etapa como piloto en activo al término del próximo Gran Premio de Portugal, despidiéndose de un paddock del que no se ha separado desde hace 10 años, cuando desembarcó en MotoGP de la mano del Yamaha Tech 3 tras competir en el WSBK y llevarse el título mundial de Supersport.
El británico seguirá vinculando a este paddock gracias al contrato que ha firmado con Yamaha para ocupar el puesto de Jorge Lorenzo en su equipo de pruebas, un trabajo ideal para un Crutchlow que ya estaba cansado de estar lejos de su familia y de destrozarse el cuerpo a base de caídas y lesiones.
"Escogí este trabajo de probador porque quería hacerlo, no por los wildcards", ha explicado hoy el #35 charlando con la prensa de forma online. "Ya he superado todas mis expectativas a lo largo de mi carrera y he disfrutado de mi etapa en el paddock de MotoGP. Es el momento de hacer algo nuevo".
Cal ha dejado claro que su decisión de fichar por Yamaha en calidad de probador no es un 'hasta luego', sino una retirada definitiva: “No hago esto para estar un año fuera y volver al año siguiente. Si lo hago, lo hago de forma permanente, porque aún puedo ser rápido y rodar bien, pero no tengo el estrés de competir los 22 domingos del año. Esa es una de las razones por las que elegí no correr el año que viene, porque si hubiera querido, podría haber firmado el contrato con Aprilia".
Aunque Cal considera que tiene la velocidad necesaria para seguir compitiendo al más alto nivel, la interminable lista de lesiones que ha ido acumulando en la última década -especialmente en su maltrecha pierna derecha- son un buen argumento para tomarse un descanso y disfrutar de la vida: "Estoy sufriendo mucho dolor. Llevo toda la temporada lidiando con el dolor y me he recuperado rápido de mis lesiones. No sé si podría hacerlo otra vez a lo largo de 21 carreras... sería difícil. No quiero ponerme otra vez en esta situación, no quiero volver a casa después de cada fin de semana y tener que hacer siempre rehabilitación".
La decisión de colgar las botas es uno de los momentos más importantes y duros para un piloto profesional, de ahí que Crutchlow lo consultara primero con su mujer Lucy: "Obviamente es algo que he discutido con mi familia, lo he hablado con Lucy, y es lo que quiero hacer, y ella sabe que esto es lo que yo quiero. No podía seguir así más tiempo. Hoy le he dicho a mi hija Willow que papá no correrá el año que viene. Fue triste decírselo, ella estaba en la parte trasera del coche, y se lo dijimos. Y ella respondió '¿Eso significa que estarás más en casa?' , y yo dije 'Sí', y se puso a llorar de felicidad. Eso marca una diferencia, sé que he tomado la decisión correcta para mí, mi familia y mi futuro. Ya lo sabía, pero fue bueno tener la confirmación de mi hija".
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Cal considera que "es una buena manera de volver al punto de partida, porque comencé con Yamaha y ahora he vuelto para ayudarles. Me dieron mi primera oportunidad de correr en un campeonato del mundo y fui a WSBK y a MotoGP con ellos. Es una buena historia, y ahora veremos lo que nos depara el futuro a Yamaha y a mí", concluye el #35 del LCR Honda.
