 Redacción @todocircuitoweb |
Si hay algo que define a Fernando Alonso es, además de su interminable talento, su valentía a la hora de subirse a cualquier vehículo propulsado por un motor y ser capaz de ser competitivo con él desde el minuto uno.
Desde que abandonó el paddock del Mundial de Fórmula 1 en el año 2018 con dos títulos bajo el brazo, el asturiano se ha dedicado a disfrutar de la vida y a participar en disciplinas tan dispares como las 24 Horas de Le Mans (con dos victorias), las IndyCar Series, las 24 Horas de Daytona (campeón en 2019) o su última aventura en el Rally Dakar junto a Marc Coma, acabando 13º en su debut en el raid más duro del mundo.
Si bien Alonso ha demostrado ser una leyenda viva en el mundo del automovilismo de competición, el piloto de 38 años también se ha dejado ver en alguna ocasión al manillar de una motocicleta. De hecho, en 2015 y 2016 Alonso participó en el Thanks Day Honda al ser piloto McLaren -en aquellos años usaban motor Honda-, de ahí que tuviera la oportunidad de compartir pista con Dani Pedrosa y Marc Márquez en esta gran fiesta de final de año que la marca del ala dorada organiza anualmente en Motegi.
En ambas ocasiones, Fernando no dudó en aceptar el reto de probar la RC213V de MotoGP, un prototipo de más de 250 cv de potencia y un peso de sólo 157 kilos que, según ha declarado el propio Alonso en una entevista reciente ofrecida en el perfil de Instagram de las 24 Horas de Le Mans, le llegó a dar "miedo".
"He probado dos veces la MotoGP, en 2015 y 2016 en Motegi, al final del año en un evento de Honda con todos sus pilotos", ha explicado el dos veces campeón del mundo de F1. "Márquez pilotó el Super GT y yo la MotoGP. En 2016, la segunda vez, traté de apretar más, pero la MotoGP es muy rápida, da miedo. La primera vez, Marquez me marcaba la línea y me decía los trucos. En un punto de la recta cuando levanté la cabeza el aire casi me tira, así que no lo volví a hacer", recuerda el asturiano entre risas.
Durante su directo con todos los fans de las 24 Horas de Le Mans, Alonso no dudó en lanzarle un guante a otra leyenda viva de MotoGP, Valentino Rossi, que en más de una ocasión ya ha dicho que entre sus planes de futuro contempla correr las 24 Horas de Le Mans y también las de Nürburgring.
Fernando, ganador de la cita francesa en 2018 y 2019 con un Toyota TS050 Hybrid junto a Sébastien Buemi y Kazuki Nakajima, asegura que "le diría a Valentino que lo haga, que lo intente, porque es una experiencia para toda la vida".
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Sin embargo, el español avisa al de Tavullia de la dureza que supone una prueba de este calibre: "Debe preparar la carrera bien ya que todo es muy profesional y muy competitivo, no es sólo resistir, no hay un momento de relax. Necesitas trabajar mentalmente, porque hay momentos en los que te sientes bajo y tienes que aceptarlo, cuidar la alimentación, el descanso... Se disfruta, pero también se trabaja mucho", concluye Fernando Alonso.
