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Maverick Viñales calificó la de Aragón como "la peor carrera" desde que el piloto español llegó a Yamaha en la temporada 2017. El pobre rendimiento de la YZR-M1 en Motorland a lo largo de los libres del viernes y el sábado fue un adelanto de lo que Valentino y Maverick vivieron en carrera. El italiano, que se había clasificado 17º, salvó los muebles con un octavo puesto. Viñales, sin embargo, sólo pudo ganar cuatro posiciones en carrera tras haber arrancado 14º en parrilla.
"Es mi peor carrera desde que estoy en Yamaha, en la que he tenido las peores sensaciones", explicó el #25 a la prensa en el paddock de Aragón. "No puedo ni decir un problema concreto porque cada área iba mal, no había ninguna que fuera bien", añadió Viñales, que estuvo peleando en todo momento con pilotos satélite: "No me comparo ni con pilotos de fábrica, me comparo con satélites, esos iban mejor que yo y es muy decepcionante".
El de Figueras no entiende cómo es posible que, después de las "buenas sensaciones" que le dejó el test de agosto celebrado en este mismo circuito, cierren un fin de semana tan malo. "No hay mucho que decir, hay que olvidar esta carrera y tranquilizarse, concentrarse e intentarlo de nuevo en Buriram".
Además de la falta constante de grip, la carrera de Viñales se vio condicionada ya desde la primera vuelta, cuando pasó de la 14ª a la 19ª posición en el giro inicial por culpa de una mala salida. "Hemos probado una cosa nueva en el embrague pero parece que hoy no funcionó bien", señaló el español, que resumió así sus sensaciones en carrera: "Apreté y la moto se iba todo el rato, no puede hacer nada. Cuando vi a Valentino intenté atraparle pero destrocé los neumáticos".
Respecto a la carrera que completó su compañero de equipo, Valentino Rossi, Viñales confesó que el italiano realizó más modificaciones en su moto respecto al sábado que parecen haber funcionado mejor: "Valentino corrió con una moto algo diferente a la de ayer [sábado]. Yo he cambiado algo los pesos de la moto para ponerle más presión al nemático pero fue peor, un completo desastre".
Yamaha ya acumula 23 carreras sin ganar, la peor sequía histórica de la fábrica japonesa en MotoGP y 500. Lo lógico sería pensar que el único objetivo de Viñales pasa por ganar en la próxima carrera y acabar con esta mala racha, pero el español dice "no tener objetivos" ahora mismo. "Los perdí cuando vinimos aquí [Aragón] en 2017. Seguro que hay mucho trabajo por hacer antes de poder decir que tenemos un objetiuvo", apuntó Maverick.
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La próxima cita del Mundial será en Tailandia, en el Circuito de Buriram, una pista en la que las Yamaha no fueron nada bien durante el único test que han podido disputar aquí. "Fue una de las peores pistas en las que hemos ido en los test. Johann estuvo fuerte ahí, pero no lo sé, no tengo ni idea, expectativa cero. Intentaré ir allí y dar lo mejor, estar tranquilo y concentrado", señaló Viñales, que de momento se conformaría con poder entrar en la Q2 directamente: "Hay que centrarse en ir directos a la Q2, cosa que parece difícil. No puedo afrontar un fin de semana pensando que puedo ganar porque no es verdad, no me puedo crear falsas expectativas a mí mismo".
"Tengo que darme cuenta de dónde estamos ahora", sentenció Maverick, centrado en "hacer que la moto vaya mejor. El objetivo de ganar se perdió hace muchas carreras, ahora es ir a la Q2 y veremos".