 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
"¡Me he jugado un comodín de la baraja! Estoy un poco golpeado, pero tengo la piel dura". Con esta frase llena de ironía Michele Pirro compartía su primera imagen en redes sociales tras el brutal accidente que el piloto de pruebas oficial de Ducati ha sufrido en Mugello durante el ecuador del FP2 del Gran Premio de Italia.
Como si de un milagro se tratase, y después de haber salido despedido de su moto a casi 300 km/h, el wildcard de Ducati no se ha roto ningún hueso del cuerpo; de hecho, de acuerdo al último parte médico que ha facilitado la marca de Borgo Panigale, Pirro sólo sufre diversas contusiones en el abdomen y la espalda, además de un hombro dislocado que ya ha sido colocado en su sitio.
Las pruebas médicas a las que se ha sometido Pirro en el Hospital de Firenze -incluyendo una tomografía computarizada de la cabeza- han descartado cualquier lesión de importancia en el cuerpo del piloto italiano, que pasará la noche en observación.
Si todo va bien, Pirro recibirá el alta médica mañana por la mañana. El piloto quiere salir mañana al FP3 de MotoGP tal y como ha asegurado Paolo Ciabatti, director deportivo de Ducati, pero parece imposible que Pirro pase el chequeo médico después de la espectacular caída que ha sufrido.
Pendientes del estado de @PirroRider después de este grave accidente. #MotoGP #ItalianGP pic.twitter.com/Ec0wTHLpiW
— MotoGP en Movistar+ (@movistar_motogp) 1 de junio de 2018
Por otro lado, en Brembo ya han tenido la oportunidad de analizar el estado del sistema de frenos de la moto de Pirro y, en principio, los técnicos de la marca italiana no han encontrado ningún problema. Por lo tanto, todo a punta a que el shimmie que Pirro sufrió en el cambio de rasante le desestabilizó en la fase inicial de frenada, y cuando el italiano trató de detener su Ducati, se quedó sin espacio para parar la moto y presionó en exceso la maneta de freno.
Casey Stoner también ha explicado que los frenos de carbono que montan las MotoGP necesitan algo de calentamiento antes de alcanzar su punto óptimo de temperatura; y siendo la de San Donato la frenada más fuerte del Mundial -pasan de 350 km/h a 90 km/h en 200 metros-, existe la posibilidad de que Pirro no llegase a esa primera frenada con la temperatura correcta en sus discos y pastillas.
La caída de Pirro en Mugello es un jarro de agua fría para las aspiraciones del piloto de pruebas de Ducati, que este año tenía aseguradas tres apariciones como wildcard en MotoGP, siendo la de Mugello la más importante para el piloto de San Giovanni Rotondo al tratarse de la pista de pruebas privada de Ducati.
