 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
Tres carreras ha necesitado Andrea Dovizioso para darse cuenta de que la Desmosedici GP17 no es la evolución que el piloto de Forli estaba esperando esta temporada. Tras la cita de Austin, Dovizioso sorprendió a los medios con unas declaraciones que se salían de la habitual discreción a la que nos tiene acostumbrados el italiano, urgiendo a Ducati un nuevo planteamiento en el desarrollo de la moto de cara a la próxima temporada.
Tras acabar sexto en Austin sin posibilidades de pelear por las posiciones de cabeza, Dovizioso aseguró que la situación actual del equipo de fábrica de Borgo Panigale "no es buena". "Vemos que estamos más cerca que el año pasado, pero por el momento no somos tan competitivos como nos gustaría", lamentaba Dovi, que ocupa la cuarta posición de la general del mundial con 30 puntos, a 36 del líder Valentino Rossi.
El dorsal #04 de MotoGP ya no quiere seguir adivinando lo que ocurrirá en la carrera del próximo fin de semana; Dovizioso quiere saber los planes de Ducati a medio y largo plazo, por eso lamenta que ahora mismo no exista "un plan preciso". "No hay que hablar más de Jerez, Le Mans o Mugello, porque somos un equipo de fábrica y esta velocidad no nos permitirá luchar por el título. Este es el aspecto más importante. Ahora es el momento de sentarnos en la mesa y hablar sobre el futuro", reclama el italiano.
¿Cuándo llegará la respuesta de Ducati? Dovizioso no lo sabe, aunque es consciente de que entran muchos factores en juego: "Si finalmente será este año o no, depende de una serie de factores. Pero no puedes predecir cuantos meses necesitaremos para hacer un cambio".
Hablar de Ducati en MotoGP es hablar de potencia bruta y de velocidad en recta. Las Desmosedici han sido, desde sus inicios, las motos más rápidas de la parrilla, aunque también han mostrado carencias, sobre todo a la hora de meterlas en curva. Por este motivo, Dovizioso quiere que Ducati desarrolle una GP18 más completa: "Tenemos que hablar sobre la moto en una visión de 360 grados. No hay un único aspecto malo en el que tengamos que trabajar. Es una mezcla de muchas cosas que debemos trabajar en conjunto".
El de Forli no quiere calificar la situación de "desastre", y pide "mantener la calma y trabajar. Pero soy el primero en estar decepcionado al conocer los límites de la moto".
Su compañero de box, Jorge Lorenzo, también cree que Ducati debería replantearse las cosas a medio plazo. El mallorquín no cuenta con los cinco años de experiencia que acumula Dovizioso con la Desmosedici, pero también opina que la fábrica italiana debería centrar el desarrollo de la GP18 en el chasis, mejorando su maniobrabilidad, sin poner tanto énfasis en la potencia bruta del motor.
En declaraciones recogidas por Motorsport.com, Lorenzo explicó en Austin que “Yamaha y Ducati son dos fábricas diferentes, con dos filosofías distintas. Yamaha siempre ha estado muy obsesionada con el chasis, con hacer la vida del piloto más fácil”, cuenta el mallorquín, 13º en la general de MotoGP con 12 puntos en su casillero.
“En cambio", añade Jorge, "Ducati ha optado en los últimos diez años por fabricar el motor más potente y manejarlo con una muy buena electrónica. Puede que ahora tengamos que cambiar prioridades, y al margen de seguir desarrollando el motor, probar distintos tipos de chasis para facilitar el giro en curva, y hacerle al piloto la vida más fácil", finaliza el #99, que en Austin volvió a modificar la altura del asiento de su GP17 para intentar mejorar su movimiento en curva, una postura más 'Ducati' que obliga a Lorenzo a modificar su estilo de pilotaje de forma sutancial (en la Yamaha iba sentado más bajo).
