 Por Cristian Ramón Marín @Crms74 | Google+ |
Valencia.- Aleix Espargaró llega al Gran Premio de Valencia 2016 con la posibilidad de convertirse en el décimo ganador del año. Es el único piloto oficial de las fábricas japonesas que no ha terminado primero una carrera en lo que va de temporada, y el piloto del Team Suzuki Ecstar no esconde sus intenciones: “Lo voy a intentar con todas mis fuerzas. Este fin de semana me da igual no puntuar. Veo lejos el ganar, pero tengo la sensación de poder luchar por el podio y estar ahí”. Defiende que su montura es buena para un trazado corto y con muchos giros como el Ricardo Tormo, pero también que irá “un poquito mejor de motor” que en otras pistas.
La pista Valenciana fue escenario de un test de Suzuki a mitad de temporada, pero, para el de Granollers, esas pruebas no son una referencia fiable, porque cambiaron la moto “radicalmente” en Aragón.
La marcha a Aprilia
Durante los próximos tres días, Aleix disputará su último Gran Premio a lomos de la GSX-RR. El próximo martes se convertirá en piloto de fábrica de Aprilia, y ha repasado su trayectoria en las filasd e Hammamatsu. “Han sido dos años muy bonitos, con un grupo de gente espectacular, en los que hemos evolucionado una moto que está casi para luchar regularmente por el podio. El primer día que probé la moto nos llevamos casi un chasco, así que estoy muy contento con el trabajo. Es triste porque me habría gustado seguir la evolución y la historia con Suzuki, pero así es la vida. Vamos a iniciar un proyecto nuevo, muy emocionante”, ha reflexionado.
Respecto a la competitividad de su nueva moto, el #41 cree la Aprilia actual es “mejor” que la primera versión de la Suzuki que probó: “Tiene una base muy buena, Álvaro ha hecho un trabajo impresionante en los últimos cinco o seis Grandes Premios, y la verdad es que estoy muy motivado”. El motor que los de Noale estrenaron en Malasia hico que la moto corriera “muchísimo”. “Toda la fábrica está muy volcada. Me hace mucha ilusión en todos los sentidos”.
Para este fin de semana, Aleix espera que la carrera se dispute en seco, y bromea con la posibilidad de que caiga agua el domingo: "Si llueve, me quedaré en el motorhome".
