 Por Alfonso Somoza @sukosomoza | Google + |
Andrea Iannone ya está en Sepang dispuesto a recuperar el asiento de su Ducati Desmosedici GP16 después de permanecer en el dique seco durante los últimos cuatro grandes premios. El piloto italiano sufrió una caída a gran velocidad durante los libres del GP de San Marino, fracturándose una vértebra que le ha impedido correr en Misano, Aragón, Motegi y Phillip Island, cuatro carreras en las que Iannone cedió los mandos de su moto a Michele Pirro y Héctor Barberá.
Hablando con GPone.com en el hall de su hotel en Sepang, el piloto de Vasto explica que "en caliente no me di cuenta de lo serio que era el problema", en referencia a lo ocurrido en Misano tras su caída, cuando el responsable médico del circuito no le permitió seguir corriendo el fin de semana. "Por entonces yo sólo quería intentar pilotar. No me lo permitieron y me vi forzado a probar de nuevo en Aragón dos semanas después".
Después de intentarlo en Aragón -bajándose de la moto tras el primer libre-, Iannone renunció a correr en Japón y Australia "por los dolores en la espalda". Llegó incluso a mandarle un mensaje a Davide Giugliano, piloto de Ducati en el WSBK, que ya había sufrido una lesión similar el año pasado: "Mira lo que me escribió", dice Andrea mostrando su teléfono móvil: "Querido Andrea, tómate el tiempo que necesites, al principio no parece nada pero la espalda es una putada increíble".
¿Cómo está ahora la fractura? "La vértebra sigue rota, los médicos me siguen diciendo lo mismo: para curarla bien hacen falta dos meses y medio, y todavía no se han cumplido".
A pesar de que los médicos le han recomendado a Iannone que guarde reposo durante otro mes más, la presión de Ducati y el hecho de que sólo le queden dos carreras con la fábrica italiana, han sido motivos suficientes para que Andrea se suba a un avión rumbo a Malasia.
"Ducati me ha presionado, aunque también ha habido otros", cuenta el ganador del GP de Austria. "Así que me subí en el avión donde he sufrido bastante, además aquí la humedad no ayuda". Y asegura que su objetivo es disputar la carrera: "¿Venir aquí para nada? No, voy a probar, porque lo que quiero es correr. Además será una de mis últimas oportunidades de pilotar la Ducati"
Preguntado por su estado de salud, Iannone asegura "no estar mal", si bien "no estoy perfecto. Ha sido una situación difícil de aceptar, sobre todo porque cuando me lesioné estaba en un buen momento. Por desgracia no tengo experiencia con este tipo de lesiones y no te das cuenta de lo larga que es la rehabilitación.... ha pasado un mes y para mí ha sido como una vida entera".
Por último, en relación a las críticas que ha recibido en Redes Sociales a raíz de su lesión, el italiano les resta importancia: "Es normal que la gente lo piense porque no saben nada de mi lesión ni de la exigencia física y psicológica que requiere una MotoGP. Es fácil escribir delante de un ordenador, pero sólo sabes cómo es la realidad cuando la vives. Está bien que puedas expresar tu opinión, pero a veces las cosas son distintas".
