 Por Alfonso Somoza @sukosomoza | Google + |
A pesar de que Michael Van der Mark se quedó fuera del podio en la última carrera del Mundial de Superbike celebrada en Lausitzring bajo un intenso aguacero, el piloto holandés fue uno de los grandes protagonistas del domingo después de irse al suelo a falta de tres vueltas para el final y ser capaz de volver a pista para terminar cruzando la línea de meta en octava posición.
Van der Mark perdió el tren delantero de su Honda Fireblade en la curva diez del trazado holandés cuando marchaba en una solitaria sexta posición. Aunque la caída fue bastante limpia, la moto dio varias vueltas de campana cuando entró en la escapatoria, quedando severamente dañada.
El piloto del Honda Racing SBK Team no lo dudó un segundo y, ayudado por los comisarios, levantó la moto y regresó a la pista a pesar de tener la maneta de freno prácticamente fuera, el depósito totalmente abollado y la cúpula y parte del carenado frontal arrancados. En estas condiciones, Van der Mark logró terminar en octava posición y sumar un valioso puñado de puntos en la general que le permiten mantenerse en cuarta posición con ocho puntos de ventaja sobre su compañero Nicky Hayden.
"Hice un buen comienzo, pero la pista estaba muy resbaladiza", explicó el futuro piloto de Yamaha tras la carrera. "Después de un par de vueltas, vi que Giugliano se quedaba fuera de carrera e inmediatamente pensé en la situación del Campeonato, ya que la prioridad era mantenerse en pie. A tres vueltas para el final simplemente se me cerró de delante y me caí. Tenía muchas ganas de terminar la carrera así que cogí la moto y di dos las dos últimas vueltas casi sin freno delantero. No sé cómo pude terminarla, pero estos puntos son muy importantes para mí, así que en líneas generales no me siento muy decepcionado".
En este vídeo puedes ver la caída y la posterior gesta de Van der Mark acabando la carrera con una moto prácticamente destrozada:
