 Por Alfonso Somoza @sukosomoza | Google + |
Maverick Viñales ha conseguido hoy en Australia su cuarto podio de la temporada. El piloto de Suzuki ha vuelto a protagonizar una carrera de menos a más, saliendo desde la 13ª posición para terminar subiendo al tercer peldaño del podio tras una bonita pelea en las últimas vueltas con su compañero de equipo, Aleix Espargaró -quese ha ido al suelo-, y con la Ducati oficial de Andrea Dovizioso.
"Creo que si no hubiese perdido esas tres o cuatro vueltas con Dovizioso y Aleix quizás podría haber llegado a Valentino", lamentaba el de Suzuki, que no ha podido engancharse al colín del italiano. "Creo que con el ritmo que venía imponiendo llegaba, y habría sido bonito luchar, habría sido una lucha muy buena".
A pesar de no poder alcanzar a Valentino, Viñales reconoce estar "contento", y cree que "el equipo ha hecho un gran trabajo, el neumático delantero estaba al límite, hemos escogido el duro porque me daba bastante paso por curva y eso me ha hecho conservar el neumático hasta el final".
"Cuando me ha pasado Valentino y él ha podido apretar más que al principio he decidido convervar la goma hasta el final y así lo he hecho, he apretado en las últimas vueltas. Estoy muy contento por estar en el podio dos veces seguidas", explica el de Figueres, que también fue tercero en Japón hace una semana.
En la parte final de la carrera, Maverick ha luchado de tú a tú contra Aleix Espargaró y Andrea Dovizioso, que ha aprovechado la potencia extra del propulsor de su Ducati para superar a las dos Suzuki cada vez que los tres pasaban por la recta de meta. "Ha habido una vuelta que en la última curva le he adelantado por fuera, luego él por dento... cada piloto juega con lo que tiene, él siempre es más rápido en las rectas", declaraba Viñales en relación a Dovi.
Con su cuarto podio del año, Suzuki ya acumula seis puntos de concesión esta temporada, lo que significa que en 2017 tendrá que correr en igualdad de condiciones respecto al resto de fábricas: motor congelado, 5 propulsores por temporada (en lugar de 7) y menos días de test a lo largo del año.
Viñales, que el próximo año correrá con Yamaha, respondía en tono de humor que era "mejor" haber perdido estás concesiones, aunque luego añadía lo siguiente: "Realmente contetísimo, este fin de semana ha sido muy duro, creo que en condiciones normales habríamos optado a la victoria, pero saliendo 13º es lo que tiene, quizás si hubiera tenido un poco más de suerte en la primera vuelta podría haber apretado un poco más, pero contento. Quiero dar las gracias al equipo, creo que hemos hecho una buena elección de neumáticos".
